"Las ayudas son necesarias para la alta competici¨®n"
Pascua Piqueras, entrenador de Cristina P¨¦rez, denuncia la hipocres¨ªa de los dirigentes en el 'doping'
JUAN MORA, Manuel Pascua Piqueras es el entrenador de Cristina P¨¦rez, la atleta que dio positivo este verano. La pol¨¦mica que arrastra nace en las ayudas farmacol¨®gicas que reciben los atletas que ¨¦l entrena. Se reafirma en ellas: "Por supuesto que siempre he buscado un m¨¦dico que atienda a mi gente. Ser¨ªa para meterme en la c¨¢rcel si no lo hiciera". Dice que el deportista realiza tal esfuerzo que quien no cuente con ayudas pone en peligro su salud. Y califica de hip¨®crita la actitud de aquellos dirigentes que las condenan. "Las ayudas farmacol¨®gicas son necesarias para la alta competici¨®n".
Pregunta. ?Usted fue consciente de que la sustancia tomada por Cristina P¨¦rez daba positivo?Respuesta. La posibilidad de que tomara anfetaminas es est¨²pida. Hay indicios de que esto pudiera ser el remate a una campana porque algunos de mis atletas, como Carreira, Lindoso, Nombela, Gregoria Ferrer, han recibido ofertas para que hablaran de doping. Cuando dijeron que yo no les dopaba, entonces no interesaban. En esos periodistas no hab¨ªa intenci¨®n de decir la verdad, sino la de manipular la informaci¨®n. Y si hay personas capaces de pagar para que alguien diga lo que a uno le interesa, tambi¨¦n lo son de hacer cualquier otra cosa.
P. ?Quiere decir que hubo manipulaciones en el control de Cristina P¨¦rez?
R. Hubo irregularidades manifiestas. Yo s¨®lo quiero resaltar un ejemplo. Cuando Cristina hizo r¨¦cord en Se¨²l la entrevist¨® la televisi¨®n. En las im¨¢genes se puede ver a una persona que se acerca para ofrecerla una bebida. La rechaza, pero esa persona vuelve a insistir y Cristina la bebe. Y es que cuando el deportista se siente euf¨®rico, y adem¨¢s tiene sed tras el esfuerzo, bebe inconscientemente lo primero que le ofrecen. Lo de Se¨²l pudo haber ocurrido primero en Barcelona y con una intenci¨®n clara.
P. Si es realidad esa campa?a, el Consejo Superior de Deportes se ha aliado al ordenar que se abra una investigaci¨®n.
R. El CSD lo que ha hecho es no desaprovechar una ocasi¨®n para sensibilizar a la gente y que as¨ª apoye la ley contra el doping que se dispone a sacar. Los deportistas no se dopan ahora m¨¢s que antes. Las cifras est¨¢n ah¨ª: en Los ?ngeles hubo el doble de positivos que en Se¨²l. Ocurre que ahora interesa airear el esc¨¢ndalo porque los dirigentes est¨¢n inmersos en una caza de brujas. El deporte ol¨ªmpico necesita una bandera para autoafirmarse. Esta situaci¨®n me recuerda a la de hace veinte a?os con el profesionalismo, cuando el deporte, s¨®lo por eso, se consider¨® suelo.
P. ?Quiere decir que est¨¢ a favor del doping?
R. No estoy a favor del doping, estoy a favor de las ayudas farmacol¨®gicas porque son necesarias en la alta competici¨®n. El atleta para establecer r¨¦cords ha de entrar, necesariamente, en el terreno de lo desconocido. Ya es un riesgo que se acepta. Entonces, para soportar los esfuerzos del entrenamiento ha de someterse a una recuperaci¨®n que no se encuentra s¨®lamente en los alimentos. Necesita un exhaustivo control m¨¦dico, que desgraciadamente en Espa?a no tenernos. El CSD lleva a?os prometiendo centros de alto rendimiento y laboratorios, pero lo cierto es que seguimos como antes y el trabajo tenemos que realizarlo en plan de comando.
P. ?Reconoce entonces las acusaciones de que usted siempre tiene un m¨¦dico para proporcionar ayudas a los atletas?
R. Por supuesto que siempre he buscado un m¨¦dico que atienda a mi gente. Ser¨ªa para meterme en la c¨¢rcel si no lo hiciera. Cuando un atleta empieza a entrenarse tiene unos ¨ªndices normales en su organismo, que van disminuyendo seg¨²n aumenta el trabajo. El m¨¦dico es entonces el encargado de ir advirti¨¦ndolo y reponiendo todo aquello que el atleta pierda.
P. Pero sin administrar sustancias prohibidas.
R. Por eso es necesario cambiar la reglamentaci¨®n antidoping. Resulta que un m¨¦dico puede recertarme cualquier producto, pero no a un atleta. Oiga, si es malo para ¨¦l, tambi¨¦n lo ser¨¢ para m¨ª. Que me expliquen esto..
P. Hay productos alternativos; que no dan positivo.
R. Pero no, son los mejores. Cuando un m¨¦dico receta un producto es porque es el m¨¢s r¨¢pido y efectivo. A nadie se le receta algo para que se recupere en dos meses en vez de en uno. Pues a los atletas s¨ª.
Efectos secundarios
P. Tambi¨¦n hay productos prohibidos porque son nocivos.
R. Cualquier producto produce efectos secundarios. Por ejemplo, la simple aspirina ha producido perforaciones de est¨®mago y problemas circulatorios. Por eso existen unos profesionales, los m¨¦dicos, que son los ¨²nicos responsables de su aplicaci¨®n en cada caso al paciente. Una medicina recetada por un m¨¦dico y aplicada en las dosis terap¨¦uticas normales, en ning¨²n caso debe considerarse doping. La sociedad actual es hip¨®crita porque es posible que los propios parlamentarios que tienen que aprobar la nueva ley del doping, si los debates se prolongan hasta la madrugada, habr¨¢n tenido que tomarse m¨¢s de cinco caf¨¦s, que autom¨¢ticamente producir¨ªan un positivo en el atletismo.
P. El deporte, por su propia filosof¨ªa, tiene que dar ejemplo.
R. De acuerdo, pero entonces que no se haga apolog¨ªa del esfuerzo, porque competir a alto nivel no es sano. Si se proh¨ªben las ayudas, el hombre no podr¨¢ correr los 100 metros en menos de 10 segundos o afrontar tres carreras de 5.000 metros consecutivas. Y entonces veremos los estadios vac¨ªos y ese ejemplo de los mitos que buscan todos los ni?os desaparecer¨¢. Ayuda artificial tambi¨¦n es correr con zapatillas especiales, saltar con p¨¦rtigas de fibras de carbono o entrenarse con m¨¢quinas de musculaci¨®n. Esa filosof¨ªa es negarse al progreso.
P. Estas ayudas no tienen repercusi¨®n en el organismo.
R. Cualquier ayuda tiende a normalizar las p¨¦rdidas sufridas en el entrenamiento. Lo que produce alteraciones en el organismo es el entrenamiento, de ah¨ª la necesidad de las ayudas.
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