Una bola gigantesca de granito aterroriza a un pueblo de Cantabria

Especialistas de Protecci¨®n Civil provistos de un contador de radiactividad se desplazaron anteayer hasta el pueblo de Cades (Ayuntamiento de Herrer¨ªas, de unos 1.000 habitantes, a 70 kil¨®metros de Santander) para tranquilizar al vecindario tras comprobar que el considerable trozo de hielo ca¨ªdo el d¨ªa 17 pasado sobre la comarca no ten¨ªa car¨¢cter radiactivo.

Portavoces del observatorio meteorol¨®gico de Santander rechazan la idea de que el fen¨®meno pueda haber tenido un origen natural, aunque aceptan la versi¨®n de los testigos. El luminoso 17 de octubre, con un c¨¢lido viento sur, trajo a Cantabria una temperatura estival, con una m¨¢xima de 24,8 grados. El mismo ambiente se registraba, a las 10.30 horas, en Herrer¨ªas. En mangas de camisa andaban casi todos como el septuagenario Manuel Dosal, ocupado en afilar el dalle en el llamado lugar de Pe?a de la Bra?a cercano a los caser¨ªos de Cades. En los alrededores otros convecinos, entre ellos Juan Obeso, Benjam¨ªn y Ra¨²l Dosal y Roberto Garc¨ªa saboreaban una jornada tan propicia para la oto?ada cuando, s¨²bitamente, escucharon el eco de una precipitaci¨®n. Los testimonios son coincidentes respecto de la gran bola de hielo, un "inmenso granizo", precisaron, que se abati¨® sobre uno de los nogales del lugar, cortando un trozo de copa de unos 20 cent¨ªmetros de circunferencia.

Uno de los trozos, tras la ca¨ªda, ten¨ªa el tama?o de una hogaza de pan, asegur¨® otro de los Dosal. Abreviando el di¨¢logo antes de que se le derritiera entre las manos uno de los vestigios del inmenso granizo, que hab¨ªa sido llevado a la escuela por los testigos, Juan del Prado, el maestro, habl¨® a sus alumnos, desconcertados y ansiosos de saber, del extra?o proceder de la atm¨®sfera. Nadie en Cades pudo explicarse el fen¨®meno.

Un trozo del 'Cosmos'

Alguien en la taberna se refiri¨® al sat¨¦lite Cosmos 1900 y lo relacion¨® con el suceso de la Pe?a de la Bra?a. As¨ª que Jes¨²s Fern¨¢ndez, el m¨¦dico que atiende el consultorio de Bielva, no tard¨® en ver desfilar vecinos que jam¨¢s hab¨ªan acudido a su consulta y ahora denunciaban desarreglos en su salud, temerosos de haber tocado el hielo de la muerte, el temible y contaminante resto del sat¨¦lite. Fue Fern¨¢ndez quien alert¨® a Protecci¨®n Civil.Dos j¨®venes expertos se trasladaron al pueblo y a lo largo de horas recorrieron la zona armados de un Dok408 que mide en milirads los m¨¢s leves indicios de radioactividad. "Lo primero que hicimos", manifestaron ayer a este peri¨®dico, "fue tratar de detectar alguna anormalidad bajo el nogal donde cay¨® el meteoro o lo que fuese. All¨ª est¨¢ todav¨ªa la parte del ¨¢rbol que se llev¨® por delante. Pero ni una sola se?al de radioactividad, ni en el suelo ni en las manos de quienes tocaron el hielo".