Sonoridad rotunda
La presencia de Martha Argerich supone siempre un acontecimiento aun en medio de las m¨²ltiples citas musicales de estos d¨ªas. Anunciada inicialmente en recital individual, ha sido en un recital para dos pianos como la hemos escuchado. A su lado, y en lograda compenetraci¨®n, el brasile?o Nelson Freire, buen solista pero no del nivel de la Argerich.Ambos ofrecieron un precioso programa en el que el virtuosismo dominaba, pero tambi¨¦n hab¨ªa cabida para el lirismo. ?ste se centr¨® en el precioso Rond¨® op. 107 para piano a cuatro manos, de Schubert, y, muy especialmente, en la Romanza de la Suite n¨²mero 2 para dos pianos op. 17, de Rachmaninov, por cierto anunciada equivocadamente en las notas al programa. Aqu¨ª se produjo lo mejor de la tarde. Martha Argerich, bien secundada por Freire, despleg¨® una musicalidad y profundidad que dio sentido a todo el virtuosismo que previamente hab¨ªamos admirado en la Introducci¨®n y valse de la misma obra. Seguidamente nos deslumbrar¨ªa en una Tarantella absolutamente espectacular y martirio para las dos se?oritas que, en su funci¨®n de pasar las p¨¢ginas a los solistas, ve¨ªan tantas notas que no sab¨ªan por d¨®nde andaban. Fantas¨ªa, refinamiento y potencia sonora, tan caracter¨ªstas en ella, se disfrutaron una vez m¨¢s.
Argerich y Freire, al piano
Obras de Brahms, Rachmaninov, Lutoslawski, Schubert y Ravel. M. Argerich y N. Freire, pianos. Madrid, Auditorio Nacional, 3 de noviembre.
Otro tanto cabr¨ªa apuntar de La valse raveliana en su versi¨®n para dos pianos. Hubo frescura y sensualidad en el tema del vals para alcanzar un frenes¨ª casi demoniaco en ese segundo crescendo que se acentu¨® por la ac¨²stica de la sala de c¨¢mara. La sonoridad apabullante fue denominador com¨²n. La resonancia lleg¨® a emborronar los fortes e impedir una correcta identificaci¨®n de la parte de cada solista. Si a?adimos que cualquier ruido entre el p¨²blico se amplifica cuantiosamente llegaremos a la conclusi¨®n de la conveniencia de reestudiar una sala, cuya ac¨²stica puede convenir a instrumentos de arco o madera pero no a pianos u orquesta de c¨¢mara amplia.
Babelia
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