Jasper Dow

Nadie da un duro por aquel dinero f¨¢cil de Martin Amis que transform¨® a los feroces yuppies financieros de Tom Wolfe en amos del universo con barba de dos d¨ªas y pasiones de nueve semanas y pico. Eso se acab¨® y no precisamente por el fallido lunes negro de hace un a?o. La fortuna prestigiosa ya no se conquista en las correr¨ªas burs¨¢tiles, ya no procede del pillaje especulativo por la jungla de las altas finanzas, ya no exige gesticulantes y rugientes tropas en mangas de camisa, con el cuello rodeado de tel¨¦fonos y de verdosa mirada vegetal. En la bolsa de los actuales valores mundanos ha bajado la cotizaci¨®n de aquel veloz dinero sin patria ni f¨¢brica, que nac¨ªa y se reproduc¨ªa por los rumores sobre el propio dinero.El dinero m¨ªtico ha cambiado de templo. La catedral ya no es Wall Street, sino Sotheby's o Christie's. El nuevo arte de invertir est¨¢ en esas fabulosas inversiones en arte. Hay m¨¢s millones especulando con ¨®leos de valor que con valores de papel. Las pujas pict¨®ricas levantan m¨¢s sensac¨ªonalismo amarillo que las pujas burs¨¢tiles. El operador, el corredor, el asesor financiero, el broker, todos los grandes protagonistas de aquel dinero ochental, est¨¢n siendo suplantados por otra poderosa raza de intermediarios: el galerista, el marchante, el perito, el cr¨ªtico.

Aquellos lobos con piel de subasteros que hicieron sus fortunas en las pujas de Wall Street, comprando y vendiendo an¨®nimas firmas mercantiles, se dedican ahora a lavar, desgravar y triplicar su dinero pujando en Sotheby's cifras astron¨®micas por firmas de vanguardia. Vanguardias, por cierto, que nacieron para profanar y denunciar el mito de la firma. No es que el arte sea la nueva moneda de una era sin valores ni rumbos fijos. Es que a aquellas monedas de los grandes artesanos de la especulaci¨®n les faltaba para ser redondas la especulaci¨®n art¨ªstica. Esta disparatada fiebre por el arte es la otra cara de la moneda. La cara guapa. Por eso tiene m¨¢s morbo mercantil el ¨ªndice de cotizaci¨®n de Jasper Johns que el Dow Jones.