La conferencia de Mosc¨² adopta sus primeras conclusiones
La segunda conferencia de ministros y altos responsables del Deporte, que finaliza hoy en Mosc¨², adelant¨® ayer sus primeros acuerdos con la aprobaci¨®n de nueve proyectos de recomendaci¨®n, que se recopilar¨¢n esta tarde en la jornada de clausura. Se refieren, fundamentalmente, a la lucha contra el doping, al desarrollo del deporte y a la reducci¨®n de desigualdades entre los pa¨ªses, punto este ¨²ltimo que produjo un enfrentamiento pol¨ªtico entre la RFA y Nicaragua.En la lucha contra el doping, la conferencia se mostr¨® partidaria de apoyar los controles por sorpresa. Asimismo, se pretende salvaguardar los valores ¨¦ticos y morales del deporte y protegerlos contra las influencias perjudiciales, como la comercializaci¨®n abusiva, la violencia y el mismo doping. Otro de los puntos importantes aprobados fue la promoci¨®n del deporte en todos los grupos de poblaci¨®n, dentro del respeto a la dignidad humana, con una condena del apartheid, atenci¨®n especial a las mujeres y los minusv¨¢lidos y una resoluci¨®n contra el tabaco y el alcohol.
Francisco Guill¨¢n, jefe del gabinete de Javier G¨®mez-Navarro, intervino ayer en Susencia del secretario de Estado espa?ol, reduciendo su exposici¨®n a los planes en marcha sobre los dos problemas de moda: la lucha contra el doping, que estar¨¢ en la nueva Ley del Deporte, y la violencia. Un pa¨ªs del Tercer Mundo lleg¨® a pedir ayuda no ya a la Unesco o al COI, sino a las marcas Adidas y Puma.
Interrupci¨®n
La conferencia fue interrumpida ayer por una mujer, que habl¨® durante casi diez minutos a los sorprendidos participantes, hasta que fue retirada con discreci¨®n. De unos 60 a?os, se coloc¨® delante de la mesa presidencial durante la intervenci¨®n del representante sueco y comenz¨® a hablar en ruso con un evidente nerviosismo. Incluso llevaba unos documentos para justificar sus protestas, en el sentido de que espera una vivienda digna desde 1982, mientras criticaba el exceso de gasto en armamento. Su presencia fue tan s¨²bita que s¨®lo pasados unos minutos se acercaron a ella los delegados sovi¨¦ticos en la conferencia, pero sin conseguir que dejara de hablar. Marat Gramov, el presidente, no tuvo m¨¢s remedio, visiblemente enfadado, que suspender moment¨¢neamente la reuni¨®n.Gramov, el m¨¢ximo dirigente del deporte en la URSS, dio despu¨¦s la versi¨®n de que la mujer quer¨ªa evitar la pr¨®xima demolici¨®n de un estadio para la construcci¨®n de casas en una pequ¨¦?a ciudad de la regi¨®n de Rostov. Tras pedir disculpas por el incidente y dar su interpretaci¨®n parcial de lo que pas¨®, a?adi¨®: "Otro ejemplo de la perestroika".
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