'La raz¨®n revisada', una selecci¨®n de artistas alemanes contempor¨¢neos, en Madrid

La muestra titulada La raz¨®n revisada, que re¨²ne obra de siete j¨®venes artistas alemanes -H. Dorner (Gegenhach, 1952), G. F?rg (Fossen, 1952), H. Kiecol (Bremen, 1950), H. Mingelh?ller (D¨¹sseldorf, 1954), I. Knoebel (Dachau, 1940), T. Struth (Geldern, 1954) y G. Tuzina (Hamburgo 1.951)-, despu¨¦s de su exhibici¨®n en Barcelona, se inaugur¨® ayer en la sede madrile?a de la Fundaci¨®n Caja de Pensiones (Serrano, 160). La exposici¨®n estar¨¢ abierta hasta el 15 de enero de 1989.

En un momento art¨ªstico de an¨¢lisis reflexivo y ensimismamiento, que sucede a la euforia expansiva y el expresionismo caracter¨ªstico de la primera mitad de la presente d¨¦cada, esta exposici¨®n, empezando por su propio enunciado, se nos presenta como una empresa con tesis, como una construcci¨®n argumentada. Desde esta perspectiva, lo primero que hay que se?alar es la alta calidad no s¨®lo de su planteamiento te¨®rico, sino la corroboraci¨®n pr¨¢ctica del mismo, tanto en lo que se refiere a la selecci¨®n de los artistas y de las obras como a su articulaci¨®n y montaje, que desempe?a un papel primordial en este caso.

Cortocircultos

La argumentaci¨®n desarrollada alude, como se ha se?alado, a una revisi¨®n art¨ªstica de la raz¨®n, lo que supone, haciendo abstracci¨®n de las lejanas y profundas implicaciones que una cuesti¨®n como ¨¦sta tiene en la historia global del arte occidental el replanteamiento reflexivo de la situaci¨®n del arte actual tras la experiencia l¨ªmite del minimalismo, el movimiento vanguardista que llev¨® al lenguaje art¨ªstico a su grado cero, en el sentido de haber logrado deshacer hasta en sus ¨²ltimas consecuencias el sistema de representaci¨®n tradicional.Asumiendo esta herencia y desafiando sus l¨ªmites te¨®ricamente insalvables -los l¨ªmites, dir¨ªamos, de la raz¨®n vanguardista institucionalizada-, estos j¨®venes artistas alemanes, la mayor¨ªa de los cuales ha nacido en la d¨¦cada de los cincuenta, salvo I. Knoebel, que aqu¨ª desempe?a un papel tutelar, de antecedente, plantean una serie de cortocircuitos, mediante los cuales se pone en evidencia la evitabilidad de los dogmas formales y conceptuales de la est¨¦tica minimalista.

Obra fr¨ªa, anal¨ªtica, intensamente cr¨ªtica sin rozar lo par¨®dico, el inter¨¦s del planteamiento de estos artistas alemanes consiste en la incorporaci¨®n sutil de la espec¨ªfica sensibilidad germ¨¢nica. De manera que, compartiendo ideas b¨¢sicas, m¨¦todos y actitudes con otros artistas internacionales de su misma generaci¨®n, queda como una huella impresa absolutamente singular que los distingue.

Rotunda en su delimitaci¨®n, claro que habr¨¢ quien eche de menos, en el cap¨ªtulo de antecedentes, al ya fallecido Blinky Palermo o quien, ya de lleno en el terreno actual, apunte la pertinencia de haber incluido a un R. Mucha. Personalmente, aun admirando a ambos artistas, creo que la decisi¨®n adoptada ha sido la correcta, pues su inclusi¨®n hubiera quiz¨¢ roto el delicado equilibrio que sostiene este conjunto de c¨¢mara a siete voces. En cualquier caso, perm¨ªtaseme llamar la atenci¨®n sobre las piezas de Knoebel, las pinturas de Dorner y F?rg, las esculturas de Kiecol, las dos piezas con cart¨®n y cristal de Klingelh?ller y, en fin, las fotograf¨ªas de N¨¢poles y de Tokio de Struth.