El abogado que gestion¨® las cartas de los mercenarios de los GAL sospecha de los servicios secretos espa?oles

Jos¨¦ Gracio Ribeiro, el abogado de Lisboa que realiz¨® las gestiones para que tres mercenarios portugueses de los GAL condenados en el pa¨ªs vecino firmasen unas cartas en las que exculpaban al subcomisario Jos¨¦ Amedo y al inspector Michel Dom¨ªnguez, afirm¨® ayer ante varios periodistas que sospecha que fueron los servicios secretos espa?oles quienes le encargaron el trabajo. En las cartas, los mercenarios desment¨ªan que ambos polic¨ªas les hubiesen reclutado para atentar contra etarras en el Pa¨ªs Vasco franc¨¦s. Gracio, que no declar¨® estos extremos ante los jueces, agireg¨® que un intermediario, del que opina que pertenece a la polic¨ªa secreta portuguesa, le pag¨® sus servicios con una importante cifra de dinero.

Gracio Ribeiro, pol¨¦mico letrado que ha sido acusado en ocasiones de procedimientos dudosos, s¨ª declar¨® ante los jueces que es "el abogado m¨¢s popular de Portugal", como explicaci¨®n al hecho de que se estableciera contacto con ¨¦l para que gestionase las cartas. Precis¨® que le contrataron telef¨®nicamente, y que la persona que lo hizo, de la que no facilit¨® su identidad, hablaba desde Espa?a con un acento al que calific¨® de raro.Este letrado afirm¨® que ¨¦l mismo dict¨® las tres cartas que fueron firmadas en su presencia por Mario Correia da Cunha, Rogerio Carvalho da Silva y Antonio Jorge Ferreira. [El primero est¨¢ condenado a cuatro a?os de c¨¢rcel, y los otros dos, a ocho a?os por pertenencia a banda terrorista, y est¨¢n pendientes de juicio por los atentados contra los bares Batzoki y Consolation, de Bayona.] En las cartas, casi id¨¦nticas, los mercenarios se?alan que no conocen a Amedo y Dom¨ªnguez, y que si anteriormente afirmaron al juez que fueron estos polic¨ªas espa?oles quienes les reclutaron se debi¨® a que hab¨ªan sido presionados. Gracio tambi¨¦n tiene reconocido que los otros miembros de los GAL encarcelados en Portugal -Jean-Philippe Labade y Antonio Wolfango Pereira de Macedo- se negaron a firmar las cartas exculpatorias de los polic¨ªas espa?oles que ¨¦l les present¨®.

Fiscal ausente

Las comparecencias de los mercenarios de los GAL y del abogado Gracio se est¨¢n realizando ante la titular del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 5 de Lisboa, Mar¨ªa Jo¨¢o Romba, y en presencia del juez espa?ol Baltasar Garz¨®n y de los abogados Jos¨¦ Luis Gal¨¢n, que representa a la acci¨®n popular en el caso, y Gonzalo Casado, defensor de Amedo y Dom¨ªnguez. Lo m¨¢s significativo, sin embargo, es la ausencia del fiscal de la Audiencia Nacional Ignacio Gordillo, despu¨¦s de que el fiscal general del Estado, Javier Moscoso, calificase de "muy importantes" las cartas.Moscoso orden¨® a Ignacio Gordillo que no se opusiera a la petici¨®n de libertad de los polic¨ªas que hizo Gonzalo Casado despu¨¦s de que fuesen difundidas las cartas, y que instara una investigaci¨®n para aclarar el caso.

Gordillo, al parecer, no ha podido acudir a Lisboa por motivos familiares, pero en medios jur¨ªdicos ha sorprendido que no se haya designado un sustituto, habida cuenta de que el fiscal fue el m¨¢s interesado en la realizaci¨®n de estas diligencias.

El defensor del subcomisario Amedo se mostr¨® sorprendido por la ausencia del fiscal, mientras que el acusador Jos¨¦ Luis Gal¨¢n calific¨® el hecho de chocante.

Mario Correia reconoci¨® su firma al pie de la carta en la que exculpaba a Amedo y Dom¨ªnguez y tambi¨¦n en las diligencias de reconocimiento fotogr¨¢fico realizado el pasado 20 de junio. Este mercenario dijo que identific¨® a los dos polic¨ªas porque conoc¨ªa sus fotos por la Prensa, pero no supo dar una explicaci¨®n cuando se le se?al¨® que la imagen de Dom¨ªnguez no hab¨ªa sido publicada en junio de 1988, cuando se produjo su identificaci¨®n.

Correia, al empezar su declaraci¨®n, se encar¨® con el juez y con el abogado acusador porque en la Prensa le hab¨ªan calificado de "mercenario". La juez portuguesa y su propio abogado tuvieron que llamarle al orden. Al concluir, pidi¨® al magistrado Garz¨®n hablarle a solas, ya que ten¨ªa que contarle "otras verdades" en privado, a lo que el juez se neg¨®.

Rogerio Carvalho, en un alarde de incoherencia, ratific¨® a la vez la carta en la que afirmaba que no hab¨ªa visto nunca a los dos agentes as¨ª como la identificaci¨®n que de ellos hizo ante el juez. Carvalho no apreci¨® que existiera contradicci¨®n entre se?alar entre 33 fotos las de Dom¨ªnguez y Amedo y afirmar que no les hab¨ªa visto antes ni siquiera con otros nombres.

Labade no quiso ni ver el ¨¢lbum que conten¨ªa las fotos de los polic¨ªas, pero en los pasillos afirm¨® que estar¨ªa dispuesto a acudir a Espa?a a declarar.