Los derechos humanos
Los derechos humanos son vilmente pisoteados y ultrajados en esta tierra y tambi¨¦n en este hermoso pa¨ªs llamado Espa?a. No s¨®lo se violan los derechos humanos, se?ores gobernantes, cuando se tortura, o se mata, o se encarcela por motivos pol¨ªticos o religiosos. Se violan cuando se nos niegan a muchos espa?oles o espa?olitos nuestros m¨¢s elementales derechos del ser humano, como es tener un trabajo, una casa, una sanidad, una educaci¨®n y un dinero para poder vivir condignidad. Lo dice la Constituci¨®n, pero no se cumple, ya que a los poderes p¨²blicos y a la sociedad les es totalmente indiferente. Vivimos en una sociedad materialista, depravadora, competitiva, deshumanizada. Y luego se queja esta sociedad hip¨®crita de que hay delincuencia. Nadie nace delincuente ni bandolero. Lo crea la sociedad, las injusticias, la incultura y sus desigualdades. Soy una persona que por circunstancias de la vida tengo que tomar lo que a otros les sobra y a m¨ª me niegan para, poder sobrevivir. Y es que a muchos espa?oles no nos dejan m¨¢s, alternativa que morimos de asco en un rinc¨®n o echamos a robar. Me encuentro preso debido a tener que robar para comer, ya que se me han negado y se me niegan Ios m¨¢s elementales derechos de la persona y que est¨¢ harto ya de tanta comedia e injusticias sociales. Y esto, por desgracia, parece que sin soluci¨®n. Por favor, se?or es gobernantes, mal llamados socialistas, un poco de conciencia, de igualdad y de justicia social. Se podr¨ªan hacer tantas cosas con buena voluntad, pero no se quiere hacer nada. El Estado dice que no hay dinero, pero s¨ª hay dinero para gastos militares, hay dinero para pagar al clero, par¨¢sito de la sociedad; hay dinero para tantos gastos superfluos. Se?ores gobernantes, hay que repartir mejor las cosas, ya que el trabajo se ha convertido en un bien escaso. Cada espa?ol, un puesto de trabajo, y los que no podamos trabajar, darnos un dinero para poder vivir con dignidad. Tambi¨¦n les dir¨¦ a ustedes que de igualdad ante la ley, nada de nada. Pobre del pobre que caiga en prisi¨®n. El abogado de oficio no sirve para nada. Bueno, para hacer la comedia. Ni viene a verle a uno en prisi¨®n para nada y s¨®lo vendr¨¢ el d¨ªa del juicio para hacer pr¨¢cticamente nada. Los.que tenemos la desgracia de estar en esta situaci¨®n lo tenemos muy mal. Y es que la justicia en este pa¨ªs" es como las telara?as, donde los insectos peque?os quedan prendidos en ellas, los grandes las rompen. Est¨¢ muy claro que en las prisiones s¨®lo est¨¢n los pobres y los marginados de la sociedad. Por algo ser¨¢.-
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