En Madrid existen "polvorines' clandestinos debido a la prohibici¨®n de vender petardos

"Prohibido tirar y vender petardos en Madrid". La ordenanza de Polic¨ªa Urbana y Buen Gobierno de la Villa es as¨ª de estricta. Sin embargo, el pim, pam, pum de las explosiones reson¨® en la ciudad durante todas las Navidades. En las salas de los hospitales no faltaron casos de quemaduras. Y pudo haber sido peor. Seg¨²n un distribuidor de pirotecnia recreativa, ha habido tiendas de frutos secos que parec¨ªan polvorines. La persecuci¨®n de la venta ilegal y de los decomisos no ha conseguido disminuir los sobresaltos de los desprevenidos peatones.

Lo peor del petardo no es el ruido sino el fuego. Varios madrile?os han sufrido en sus carnes las consecuencias de una de estas explosiones a corta distancia.Es el caso de Concepci¨®n Inmaculada Jim¨¦nez Jim¨¦nez, que fue atendida la pasada Nochevieja en la casa de socorro de Arganzuela de las quemaduras que le produjo en un pie un petardo lanzado por un desconocido que celebraba en la Puerta del Sol la entrada del nuevo a?o.

En el hospital Severo Ochoa, de Legan¨¦s, varios ni?os tuvieron que ser atendidos estas Navidades por las mismas causas. El colmo lo tuvo Consuelo Garrido, auxiliar de esta instituci¨®n sanitaria, cuyas dos hijas fueron v¨ªctimas de los petardos.

Accidentes gordos

Para accidentes gordos, el ocurrido en Vallecas el 20 de diciembre pasado. Un petardo lanzado por un grupo de ni?os destruy¨® casi por completo un taller de carpinter¨ªa situado en el n¨²mero 34 de la calle de Eduardo Requena. El due?o del negocio sali¨® ileso pero tuvo que ser atendido de un ataque de nervios.Y el caso es que vender o tirar uno de estos cartuchos de p¨®lvora en Madrid equivale a saltarse la ley.

La Ordenanza de Polic¨ªa Urbana y Buen Gobierno de la Villa proh¨ªbe expresamente "incendiar petardos y mixtos, disparar cohetes y derramar l¨ªquidos corrosivos", en el cap¨ªtulo V del art¨ªculo 56.

El texto legal que regula las condiciones de venta y conservaci¨®n de los petardos es el Reglament¨® de Armas y Explosivos de 1976.

Esta normativa establece siete grupos de explosivos, seg¨²n la cantidad de p¨®lvora o material explosivo que contengan. Los petardos y fulminantes aparecen en los primeros grupos.

Los empresarios del sector consideran que la pol¨ªtica restrictiva del Ayuntamiento de Madrid s¨®lo contribuye a aumentar la venta ilegal y propiciar la inseguridad.

"En Madrid se est¨¢n vendiendo-art¨ªculos explosivos en tiendas de frutos secos sin control alguno", afirma Rafael Brau, distribuidor de pirotecnia recreativa infantil. "La venta la regula el Gobierno Civil, pero es preceptivo el informe municipal, y el Ayuntamiento de Madrid no est¨¢ por la labor".

Esta Navidad, Brau ha conseguido permisos de los ayuntamientos de Parla, M¨®stoles y San Fernando para comercializar sus productos. "La venta legal debe acogerse a unas reglas de seguridad muy estrictas, que no respetan las tiendas fraudulentas. Por ejemplo, fuera del horario comercial no se pueden tener los productos en el punto de venta, y me consta que determinados comercios de frutos secos han llegado a tener almacenados hasta 200 kilos de petardos, lo que equivale a 40 kilos de p¨®lvora activa", denuncia.

Actividad rentable

"Yo me pregunto", afirma Brau, "d¨®nde se almacenan estos productos si en Madrid el ¨²nico almac¨¦n legalizado y con medidas de seguridad es el m¨ªo. Me consta que hay alg¨²n lugar en Madrid donde est¨¢n almacenados 15.000 kilos de p¨®lvora". Seg¨²n este distribuidor, esta actividad es tan rentable en Navidad que basta la venta de 15 d¨ªas en estas fechas para vivir el resto del a?o. "Por eso, aunque est¨¦ prohibida, la venta se sigue produciendo", declara.La Polic¨ªa Municipal de Madrid ha puesto en marcha durante estas Navidades, como todos los a?os, una campa?a de vigilancia y control para detectar la venta ilegal y uso de art¨ªculos de pirotecnia recreativa, seg¨²n ha se?alado Vicente M¨¢rquez, jefe del servicio.

Los resultados, aunque todav¨ªa no se han dado a conocer, parecen m¨¢s bien pobres a tenor de las denuncias de Rafael Brau.

El d¨ªa de Navidad la Polic¨ªa Municipal decomis¨® en la plaza Mayor 500 petardos "de grueso calibre" que un individuo llevaba en una bolsa. La acci¨®n concluy¨® con la inutilizaci¨®n del explosivo utilizando para ello el sofisticado sistema de inmersi¨®n en agua.