Kuwait e Irak estudian la delimitaci¨®n de su frontera

ENVIADA ESPECIALUna delegaci¨®n kuwait¨ª, presidida por el pr¨ªncipe heredero y primer ministro del emirato, Saad al Abdul¨¢ al Sabah, se encuentra estos d¨ªas en Bagdad para intentar solucionar la disputa fronteriza con su vecino del norte. A pesar de la publicidad que en el peque?o Estado petrolero se est¨¢ dando al viaje del jefe Saad, el contenido de las conversaciones irako-kuwait¨ªes se mantiene en celoso secreto.

Nunca ha existido una frontera oficialmente reconocida entre Kuwait e Irak. Tras la independencia del emirato de Gran Breta?a, en 1961, el Gobierno de Bagdad reclam¨® su soberan¨ªa. La amenaza de una ocupaci¨®n por la fuerza oblig¨® a la ex potencia colonial primero y a la Liga ?rabe poco despu¨¦s, a enviar tropas a ese pa¨ªs.

El cambio de r¨¦gimen que dos a?os m¨¢s tarde se produjo en Irak, llev¨® consigo el reconocimiento de la independencia kuwait¨ª, decisi¨®n por la que Bagdad obtuvo un donativo de 84 millones de d¨®lares. Las disputas fronterizas quedaron de todas formas pendientes.

No se trata, como en principio pudiera pensarse, del petr¨®leo, todav¨ªa por descubrir en ese pa¨ªs cuando a comienzos de los a?os treinta se iniciaron las reclamaciones iraqu¨ªes. Fue su localizaci¨®n, en la ¨²nica bah¨ªa de aguas profundas del golfo P¨¦rsico -un verdadero puerto natural-, lo que hizo adquirir al pobre asentamiento beduino que era Kuwait en los albores de este siglo su valor estrat¨¦gico como potencial puerta para Irak y la pen¨ªnsula ar¨¢bica.

"El problema es que Irak apenas tiene una peque?a ventana al Golfo", asegura el periodista Mohamed A. al Ayiri, redactor jefe de la agencia oficial de noticias kuwait¨ª, Kuna. Esta situaci¨®n se ha hecho especialmente evidente a ra¨ªz de la guerra irano-iraqu¨ª, que durante ocho a?os ha bloqueado la salida al mar de la antigua Mesopotamia. Las diferencias, adem¨¢s de en la frontera continental, se centran sobre todo en varios canales occidentales del Chad el Arab, o Rivera de los ?rabes, la v¨ªa de agua que forman al confluir los r¨ªos Tigris y E¨²frates. Irak est¨¢ especialmente interesado en controlar las islas de Bubiy¨¢n y Warba, que ampliar¨ªan su actual salida al Golfo desde los puertos de Subair y Um al Qasem.

Buenas relaciones

"El asunto est¨¢ siendo discutido", manifest¨® el pasado mi¨¦rcoles el ministro kuwait¨ª de Informaci¨®n, jeque Yaber Mubarak al Sabah, a un grupo de periodistas europeos. que visitan el pa¨ªs. El jeque Yaber, que aprovech¨® la ocasi¨®n para se?alar las buenas relaciones existentes entre Kuwait y Bagdad, se mostr¨® optimista sobre un eventual acuerdo del que, asegur¨®, podr¨ªan obtener agua de Chad el Arab para su agricultura. El Gobierno kuwait¨ª intenta poner en marcha un ambicioso proyecto de forestaci¨®n y creaci¨®n de zonas verdes al norte del emirato, para lo cual choca con una total ausencia de fuentes acu¨ªferas.

En Kuwait capital hay rumores para todos los gustos. Una de las versiones asegura que el Gobierno estar¨ªa dispuesto a ceder Bubiy¨¢n a cambio de terreno continental. Tal posibilidad parece improbable, aunque la idea de algunas concesiones a cambio de agua no se descarta. "Como siempre, les tocar¨¢ pagar a los kuwait¨ªes", se?ala una fuente diplom¨¢tica, que advierte del peligro de costear un canal de tra¨ªda de agua desde Chad el Arab cuya llave quedar¨¢ en manos de los iraqu¨ªes.