La ca¨ªda simb¨®lica de Winnie Mandela
A lo largo de casi 30 a?os de persecuci¨®n, Winnie Mandela se convirti¨® en s¨ªmbolo de resistencia estoica, quiz¨¢ no tan fuerte como su marido encarcelado, pero s¨ª en primera l¨ªnea, con el nombre m¨¢s sonoro de la pol¨ªtica negra en Sur¨¢frica.Los primeros s¨ªntomas de que la melod¨ªa estaba perdiendo tono se dieron en abril de 1986, cuando se dijo que hab¨ªa declarado que la liberaci¨®n vendr¨ªa de la mano de "nuestras cajas de cerillas y collares", en alusi¨®n a los neum¨¢ticos quemados que se usaban para matar a los sospechosos de informar o colaborar con la polic¨ªa. Las noticias de que se estaba construyendo una gran mansi¨®n -que est¨¢ sin terminar- y de que intentaba explotar comercialmente el nombre familiar en Estados Unidos arruinaron aun m¨¢s su reputaci¨®n.
Censurar es f¨¢cil. Naturalmente, Winnie Mandela deb¨ªa haber mantenido bajo control a sus guardaespaldas y haber tenido en cuenta sus responsabilidades durante la liberaci¨®n escalonada de su marido. En todos los sentidos es dificil olvidar su comportamiento. .
Aun as¨ª, y de ning¨²n modo con intenci¨®n de disculparla, su ascensi¨®n y ca¨ªda es m¨¢s un ejemplo del da?o infligido por el apartheid al conjunto de los negros que el efecto corruptor del poder sobre una mujer que antes era conocida como Mama wetu, que en zul¨² significa madre de la naci¨®n.
, 16 de febrero.
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