Golpe psicol¨®gico
Siete de cada 10 candidatos de Sajudis son militantes comunistas. A¨²n no se les exige que elijan, pero un proceso de definici¨®n ha comenzado. El abogado Kazimierkas Moitieka ha dado un golpe psicol¨®gico al devolver el carn¨¦ del partido en estos d¨ªas revueltos. "Ten¨ªa la impresi¨®n de que me presionaban como hace 27 a?os, cuando me acusaron de miop¨ªa pol¨ªtica por defender al constructor de una iglesia", dice Moiticka.Ahora le reprochan, nos dice, un programa electoral y unas afirmaciones contrarias a la Constituci¨®n y a las leyes sovi¨¦ticas. Para Moitieka, la soberan¨ªa estatal no es posible, "ni pr¨¢ctica ni pol¨ªticamente", en el marco del Estado sovi¨¦tico. Durante los once primeros meses de 1988, dice, 47 personas dejaron el partido en Vilna y centenares en toda la Rep¨²blica.
"En general, los comunistas no mantienen las posiciones extremas, pero las declaraciones son colectivas, y ello es inquietante", dice Brazauskas. Los dirigentes del Sajudis coinciden en que el jefe del partido est¨¢ en una posici¨®n "dif¨ªcil", y se preguntan c¨®mo actuar¨¢ "si entran los carros blindados sovi¨¦ticos", una hip¨®tesis de futuro recogida incluso en un montaje de t¨ªteres que ridiculiza en Vilna a Gorbachov y a otros dirigentes de la URSS.
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