El padrino de los 'homeless'
Antes de que un reportaje de la CBS le elevara a la categor¨ªa de h¨¦roe nacional, Mitch Snyder ten¨ªa tras de s¨ª un dilatado historial como padrino de los homeless.
Aquella fue una de tantas huelgas de hambre, quiz¨¢ la m¨¢s sonada porque golpe¨® directamente las puertas de la Casa Blanca.
Corr¨ªa el a?o 1984, en plenas elecciones presidenciales, y Reagan no contaba con un escollo de 45 a?os y bigote desafiante llamado Mitch Sriyder. El portavoz de la Comunidad Creativa para la No Violencia (CCNV), uno de los grupos m¨¢s activos a favor de los homeless, cumpl¨ªa el d¨ªa 51 de la huelga de hambre para pedir al presidente que convirtiera un edificio en ruinas en un albergue.
Reagan claudic¨® en la v¨ªspera de su reelecci¨®n.
El vetusto edificio de la Calle 2, en el noroeste de Washington, sufri¨® un lavado de cara de m¨¢s de seis millones de d¨®lares y se convirti¨® en el mayor albergue de Estados Unidos.
"En los albergues y en los hoteles de Washington no queda sitio", afirma Snyder. "S¨®lo hay unas 3.500 plazas para 15.000 homeless. Nosotros tenemos que rechazar a medio centenar cada d¨ªa por falta de espacio".
"La mayor¨ªa de los refugios en Nueva York y otras ciudades", se?ala Mitch Snyder, "no re¨²nen las condiciones m¨ªnimas para acoger a las familias. Estamos creando una generaci¨®n de ni?os sin hogar, y nadie sabe lo que pasar¨¢ los pr¨®ximos a?os. La llegada de Bush a la presidencia no servir¨¢ para cambiar las cosas".
A escasos metros de la Casa Blanca, el c¨¦sped maltrecho de Lafayette Square sirve de colch¨®n a decenas de homeless.
En el invierno de 1981, el parque fue tomado por activistas que erigieron Reaganville, una ciudad fantasma de tiendas de campa?a que aguant¨® tres largos meses contra viento y marea. En el cementerio simb¨®lico de Reaganville iban surgiendo d¨ªa a d¨ªa nuevas cruces, tantas como v¨ªctimas de los rigores del fr¨ªo en todo el pa¨ªs.
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