Ludwig Wittgenstein, recortado

De los cuatro cortes que, sin haber sido consultado al respecto, sufri¨® mi art¨ªculo La leyenda del orgulloso Lucifer, publicado en el suplemento del centenario del fil¨®sofo Ludwig Wingenstein, me gustar¨ªa enmendar al menos el m¨¢s serio. Al, hablar, en el segundo p¨¢rrafo de la tercera columna, de la pertenencia de Wingenstein a la secreta sociedad universitaria de Los Ap¨®stoles, trataba, m¨¢s all¨¢ de la an¨¦cdota, de se?alar un posible influjo con, las siguientes frases omitidas: "Y si bien Wittgenstein menospreci¨® pronto a Los Ap¨®stoles, podr¨ªa decirse que el secretismo, las maneras de selecci¨®n y el ceremonial de logia son caracteres esenciales de las lecciones y trato personal del fil¨®sofo con sus alumnos a partir de 1930. Hasta el punto de que podr¨ªa achac¨¢rsele lo que Russell dec¨ªa con sarcasmo de Keynes respecto a esa sociedad: que fuera de ella, y fuera de Cambridge, se comportaba como un obispo in partibus inflidelium"- Vicente Molina Foix.