El fiscal pide la absoluci¨®n de un comisario acusado de ocultar una denuncia por torturas
El comisario de polic¨ªa Francisco ?lvarez S¨¢nchez fue juzgado ayer por la Audiencia de Bilbao acusado de presuntos delitos de prevaricaci¨®n y encubrimiento de torturas, por haber ocultado una denuncia de malos tratos a un detenido presentada por un sargento del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa. El fiscal y la defensa solicitaron en sus conclusiones finales la libre absoluci¨®n. No existe autor¨ªa conocida de los malos tratos, sostiene el ministerio p¨²blico, y en consecuencia no hay delito. El juicio qued¨® visto para sentencia.
La acusaci¨®n popular, que modific¨® a ¨²ltima hora sus peticiones, acusa al comisario Francisco ?lvarez S¨¢nchez de dos delitos: uno de infidelidad en la custodia de documento p¨²blico y otro de prevaricaci¨®n. Por lo que solicita dos a?os, cuatro meses y un d¨ªa de prisi¨®n, 20 a?os de inhabilitaci¨®n y 50.000 pesetas de multa.Los hechos se remontan a febrero del a?o 1983. El d¨ªa 23 por la noche, el sargento jefe de prevenci¨®n en la comisar¨ªa de Indauchu, en Bilbao, Felipe Delgado, present¨® una denuncia por malos tratos al detenido Fernando Serna. Delgado apreci¨® moratones en el rostro de Serna, reci¨¦n conducido desde la comisar¨ªa vizca¨ªna de Baracaldo para su ingreso en los calabozos.
El sargento del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa hab¨ªa ordenado el traslado de Serna al hospital de Basurto, donde los facultativos firmaron un parte m¨¦dico con la descripci¨®n de las lesiones. Despu¨¦s de levantar un atestado, el sargento Delgado lo entreg¨® al inspector de guardia, Jos¨¦ Luis Garc¨ªa Casquero, que, seg¨²n la acusaci¨®n, le recrimin¨® y rompi¨® el papel.
M¨¢s tarde peg¨® los trozos con cinta adhesiva y recogi¨® las copias de la papelera, adonde las hab¨ªa arrojado.
Garc¨ªa Casquero present¨® finalmente la denuncia, recogida en el libro de registro de la comisar¨ªa con el n¨²mero 1.386, a Francisco ?lvarez, entonces jefe superior de polic¨ªa de Bilbao.
El comisario ?lvarez S¨¢nchez a?adi¨® al texto una diligencia. Explicaba que Serna estaba encartado en otras diligencias en la localidad de Baracaldo y ordenaba el archivo de la denuncia. Seg¨²n la acusaci¨®n, ni la comunic¨® al juzgado ni la adjunt¨® a las diligencias relativas al detenido abiertas en Baracaldo.
Acusaci¨®n popular
Los hechos fueron comunicados al juzgado de guardia de Bilbao por la Inspecci¨®n del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa Un grupo de abogados de Bilbao se person¨® en los autos para ejercitar la acusaci¨®n popular contra el comisario ?lvarez, que posteriormente fue jefe del gabinete de operaciones especiales del Ministerio del Interior en Madrid y luego solicit¨® la excedencia del cuerpo.En el curso de la vista oral, ?lvarez atribuy¨® a un malentendido sobre formalidades en el tr¨¢mite de la denuncia la discusi¨®n entre el sargento Delgado y el inspector Garc¨ªa Casquero. Asegur¨® haber ordenado su archivo para evitar duplicidad con las diligencias de Baracaldo y dijo haber ordenado una investigaci¨®n de los presuntos malos tratos por cinco v¨ªas diferentes.
Simple accidente
El inspector Garc¨ªa Casquero insisti¨® en las diferencias de procedimiento como origen de la discusi¨®n con el sargento Delgado y atribuy¨® la rotura de la denuncia a un accidente, al extraer el texto de la m¨¢quina de escribir.Delgado, por su parte, explic¨® que vio se?ales muy visibles en el rostro del detenido. El resto de sus recuerdos es muy difuso a causa del tiempo transcurrido, se?al¨®.
Fernando Serna afirm¨® haber recibido golpes en la comisar¨ªa de Baracaldo. Explic¨® por el deseo de evitar complicaciones una declaraci¨®n anterior en las que atribu¨ªa sendos hematomas bajo los ojos a pellizcos que se hab¨ªa dado ¨¦l mismo a causa del nerviosismo.
Fernando y Mar¨ªa Rosario Serna testimoniaron durante la vista que su padre les hab¨ªa dicho al quedar en libertad que hab¨ªa sido maltratado y golpeado. El primero declar¨® haberle visto entrar con aspecto normal en una sala de la comisar¨ªa y salir luego con el rostro amoratado.
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