Lee Calhoun, doble campe¨®n ol¨ªmpico

Lee Calhoun, el m¨¢s grande vallista de los tiempos modernos, falleci¨® ayer en Erie, Estado de Pensilvania (Estados Unidos), a los 56 a?os. Con problemas de coraz¨®n desde hac¨ªa cuatro a?os, el pasado 19 de mayo sufri¨® un ataque del que no pudo recuperarse. Calhoun, que desde 1980 era entrenador jefe de la universidad de Illinois Oeste, no pudo saltar su ¨²ltima valla cuando a¨²n impart¨ªa sus conocimientos en la inagotable cantera de atletas de su pa¨ªs. Pero su nombre ya estaba, desde hace casi 30 a?os, en uno de los lugares de honor de la historia del atletismo.Calhoun, un espl¨¦ndido atleta negro de 1,85 metros y 75 kilos en sus mejores momentos, fue el primero que gan¨® dos medallas de oro consecutivas en unos Juegos Ol¨ªmpicos. Venci¨® en los 110 metros vallas de Melbourne en 1956 y repiti¨® su ¨¦xito en Roma en 1960. Tres semanas antes de su segundo triunfo ol¨ªmpico igual¨®, el 21 de agosto, el r¨¦cord mundial de la prueba con 13.2 segundos. Un a?o antes lo hab¨ªa establecido el alem¨¢n Martin Lauer, otro nombre m¨ªtico de la especialidad. Hasta 1973 no fue superado por otro norteamericano, Rod Milburn, con 13. 1. Figuras como ¨¦l, Willie Davenport, Guy Drut o los actuales Reinaldo Nehemiah (el primero en bajar de 13 segundos) y Roger Kingdom, no le han podido hacer olvidar.

Calhoun incluso se recuper¨®, entre sus dos medallas ol¨ªmpicas, de una sanci¨®n que le impidi¨® correr en 1958 por haber aceptado unos regalos en un programa de televisi¨®n. Fue otro de los damnificados por el rid¨ªculo amateurismo de entonces. Pero su coraz¨®n a¨²n pod¨ªa con todo. Despu¨¦s lleg¨® a ser entrenador del impresionante equipo de Estados Unidos en los Juegos de M¨¦xico, en 1968 (con los Beamon, Evans, Hines o Smith, entre otras estrellas), y adjunto en los de Montreal, en 1976. Ahora, ya escrita su brillante p¨¢gina de la historia, su coraz¨®n se ha parado.