El cambio de m¨¢s de 200.000 n¨²meros de tel¨¦fono en Madrid causa graves trastornos a los abonados

"Este abonado ha cambiado de tel¨¦fono; rogamos tomen nota del nuevo...". La voz fr¨ªa e impersonal la pone un contestador autom¨¢tico que se ha convertido en el principal interlocutor de los madrile?os. Unos 200.000 tel¨¦fonos se unir¨¢n este a?o a los miles de d¨ªgitos que ya han bailado desde 1987. Esta situaci¨®n, unida al caos de las comunicaciones, est¨¢ provocando graves trastornos a abonados particulares, empresas y organismos. Amplias zonas del centro pasan actualmente por esta renovaci¨®n, que Telef¨®nica justifica por razones t¨¦cnicas y que la Organizaci¨®n de Consumidores y Usuarios considera "abusiva".

F. J., vecina del barrio de Salamanca, recibi¨® una carta all¨¢ por el mes de noviembre. Su n¨²mero de tel¨¦fono, que empezaba por 411, iba a cambiar por otro que no se parec¨ªa en nada. No avisaban cu¨¢ndo, pero apremiaban: "En su propio inter¨¦s, y en el de otros abonados, le recomendamos que lo participe a amistades y relaciones comerciales y profesionales de mayor frecuencia".Pasaron uno, dos, tres meses, y como si tal cosa.

En febrero lleg¨® otra carta. Borr¨®n y cuenta nueva. Que se olvidara del n¨²mero que le dieron en noviembre y tomara nota del nuevo, el definitivo: 564... En esa ocasi¨®n le precisaron fecha y hora, del cambio: el 6 de junio, a las diez de la noche.

Y as¨ª ocurri¨®. S¨®lo que durante 10 d¨ªas, F.J. qued¨® pr¨¢cticamente incomunicada por tel¨¦fono. Pod¨ªan llamarla desde fuera, pero a ella no le daban l¨ªnea.

La Organizaci¨®n de Consumidores y Usuarios (OCU) recibe todos los d¨ªas quejas telef¨®nicas por el mal funcionamiento de las l¨ªneas. "Y eso cuando pueden dar con nosotros, porque hay ma?anas en que se queda completamente bloqueada la centralita" afirma Mercedes Mart¨ªnez, portavoz de la OCU.

Desde hace dos a?os, cuando Telef¨®nica aceler¨® la modernizaci¨®n de sus centrales, las denuncias por los cambios de tel¨¦fono han igualado a las quejas por las supuestas irregularidades en las facturas. En 1988, las reclamaciones tramitadas por la renovaci¨®n telef¨®nica se acercaron al medio centenar.

"Ninguna ha prosperado", se?ala Mercedes Mart¨ªnez, "porque Telef¨®nica tiene todas las de ganar. En los contratos se incluye una cl¨¢usula que les permite realizar los cambios por razones t¨¦cnicas. A nosotros nos parece una pr¨¢ctica abusiva, pero les ampara la ley".

Eso s¨ª, la compa?¨ªa est¨¢ obligada a comunicar al usuario el cambio de tel¨¦fono al menos con tres meses de antelaci¨®n y a dejar un contestador autom¨¢tico conectado al n¨²mero anterior para comunicar la buena nueva.

Seis meses esperando

Pero estos requisitos no se cumplen siempre, de acuerdo con la reclamaciones que recibe la OCU. Los casos van de extremo a extremo: desde quien lleva seis meses esperando el cambio anunciado hasta el que se entera de su nuevo tel¨¦fono gracias a la llamada de un amigo que se top¨® con el contestador autom¨¢tico al marcar el viejo n¨²mero.

Telef¨®nica no ha precisado cu¨¢ntos han bailado en Madrid en los dos ¨²ltimos a?os. El ex presidente de la compa?¨ªa Luis Solana reconoci¨® a finales del a?o pasado, ante una comisi¨®n de la Asamblea de Madrid, que s¨®lo este a?o est¨¢ previsto cambiar 200.000 tel¨¦fonos. El grueso de la renovaci¨®n tecnol¨®gica empieza precisamente ahora y afectar¨¢ por lo menos a 400.000 l¨ªneas antes de 1993.

Los trastornos comenzaron hace dos a?os en una amplia zona del distrito de Centro, donde miles de n¨²meros que comenzaban por dos cambiaron al cinco. Organismos oficiales como el Ayuntamiento de Madrid, el Ministerio de Hacienda, el Ministerio de Cultura y la Asamblea de Madrid; sucursales bancarias, empresas y profesionales aut¨®nomos resultaron especialmente afectados.

Los cambios han llegado en los ¨²ltimos meses a ¨¢reas tan dispares como El Viso, Pozuelo, el barrio de Salamanca, Alonso Mart¨ªnez y la zona de Orense, donde tiene su sede un sinn¨²mero de empresas. En algunos casos, los cambios son s¨®lo del primer d¨ªgito; en otros, el nuevo tel¨¦fono no coincide con el anterior ni en un solo n¨²mero.