Un Mig 'fantasma' sobrevol¨® tres pa¨ªses de la OTAN

Un avi¨®n de combate sovi¨¦tico Mig 23 sobrevol¨® ayer, sin piloto y sin armamento, tres pa¨ªses de la OTAN, para ir a estrellarse finalmente contra una casa en la localidad belga de Kooigem y causar la muerte a una persona. M¨¢s de 550 kil¨®metros por el espacio a¨¦reo de la Alianza Atl¨¢ntica recorri¨® el avi¨®n de combate sovi¨¦tico, sobre numerosas zonas habitadas en la RFA, la ciudad holandesa de Einhdoven y las belgas de Amberes y Gante, para caer pocos kil¨®metros antes de la frontera francesa.

El Ministerio de Defensa de la Rep¨²blica Federal de Alemania expres¨® ayer en Bonn su convicci¨®n de que el piloto "no se ha apeado" sobre territorio de la RFA. Inicialmente, un portavoz oficial sovi¨¦tico dijo ayer en Mosc¨² que el origen del avi¨®n "no estaba claro" pero, a ¨²ltima hora de la tarde, fuentes del Gobierno belga dijeron que las autoridades sovi¨¦ticas les hab¨ªan informado de que el avi¨®n proced¨ªa de unas maniobras que se llevan a cabo en el suroeste de Polonia y que el piloto, de nacionalidad sovi¨¦tica salt¨® en paraca¨ªdas "por razones t¨¦cnicas".Un militar belga dijo anoche en televisi¨®n que, despu¨¦s de estrellarse el avi¨®n se produjeron varias explosiones del armamento militar convencional que llevaba el aparato. El mismo portavoz a?adi¨® que, desde un primer momento, los expertos de la OTAN que siguieron el Mig sovi¨¦tico sab¨ªan que no llevaba a bordo armamento nuclear y que, en el supuesto de que lo hubiera llevado, se habr¨ªa derribado el aparato, cuando volaba a 12.000 metros de altura, a¨²n a riesgo de contaminaci¨®n nuclear.

El Mig-23 hizo todo su largo vuelo por Occidente -desde la frontera interalemana que cruz¨® a las 9.42 hora local, hasta que cay¨® a las 10.37 por falta de combustible cerca de la frontera franco-belga-, sin tripulante alguno, seg¨²n pudieron comprobar con sorpresa los pilotos de dos F-15 norteamericanos de la base dede la OTAN en Soesterberg, cerca de Utrech, que hab¨ªan acudido a interceptarlo tras dar la alarma un puesto de control antia¨¦reo de la Alianza en el estado federado alem¨¢n de Baja Sajonia.

Evitar zonas urbanas

Seg¨²n fuentes militares occidentales, que establecieron inmediatamente contacto con las autoridades sovi¨¦ticas, el avi¨®n proced¨ªa de una base cercana a Szczecin (Polonia). Nada se sab¨ªa ayer a¨²n sobre la suerte del piloto, n los motivos concretos que lo indujeron a abandonar el aparato. No obstante, la altura de vuelo al cruzar la frontera entre los bloques, unos 12.000 metros, hace pensar a los expertos militares de la RFA que el piloto salt¨® del avi¨®n antes de cruzar a Occidente ya que un intento de deserci¨®n lo habr¨ªa realizado a poca altura para evitar los radares propios y occidentales.

En ning¨²n momento se consider¨® la posibilidad de una acci¨®n hostil, seg¨²n un portavoz de las fuerzas a¨¦reas aliadas en la RFA.

Procedente del Este, el Mig-23 cruz¨® la frontera interalemana cerca de Dannenberg en el norte de Baja Sajonia.

Seg¨²n inform¨® ayer el teniente coronel Rainer Otte, portavoz del Cuartel General de la 2? Flota A¨¦rea T¨¢ctica Aliada, con sede en Moenchengladbach, el aparato fue captado de inmediato por los radar de la OTAN en este Estado federado. El mando a¨¦reo orden¨® el despegue de dos cazas norteamericanos F-15 de la base holandesa de Soesterberg.

Estos pilotos localizaron el avi¨®n sovi¨¦tico cuando sobrevolaba el Estado de Renania-Westfalia hacia Occidente. Cuando estaban a su altura, los pilotos norteamericanos comprobaron que el aparato sovi¨¦tico llevaba abierta y vac¨ªa la cabina del piloto.

Los cazas norteamericanos acompa?aron al avi¨®n en su vuelo hacia Occidente hasta que consumi¨® todo su combutible, perdi¨® lentamente altura y cay¨® finalmente en una granja agr¨ªcola de la localidad belga de Kooigem, cerca de la frontera con Francia, causando la muerte a un joven de 19 a?os, Wim Delaere, que se hallaba en la casa que roz¨® el aparato en su ca¨ªda.

No intervenci¨®n

Los F-15 que lo escoltaban no intervinieron, ya que los pilotos ten¨ªan orden de evitar "por todos los medios", seg¨²n el portavoz de las fuerzas a¨¦reas aliadas, que cayera en una zona poblada.

Estos medios inclu¨ªan el uso de las armas. Seg¨²n las mismas fuentes, los pilotos siguieron al Mig con la esperanza de que ¨¦ste pudiera llegar hasta el mar. Abatir el avi¨®n a tanta altura implicaba "grav¨ªsimos riesgos" seg¨²n estas fuentes ya que era imprevisible donde caer¨ªan los restos.