Banesto y Jos¨¦ Roquette luchan contra el grupo financiero Sonae por dos consejeros en el Banco Totta e A?ores

El Banco Espa?ol de Cr¨¦dito (Banesto) y su aliado financiero en Portugal, Jos¨¦ Roquette, pondr¨¢n en juego el jueves durante la junta de accionistas del Banco Totta e A?ores una representaci¨®n del orden del 15% para lograr dos consejeros en el Consejo de Administraci¨®n del banco parcialmente reprivatizado. Banesto-Roquette controlan en torno al 15%, con una participaci¨®n directa del banco espa?ol del 3,5%. El Gobierno de An¨ªbal Caviaco Silva inici¨® la reprivatizaci¨®n de las empresas nacionalizadas durante la revoluci¨®n de los claveles de 1974. En la pasada primavera el Gobierno vendi¨® el 49%,del capital del Totta e A?ores y de la cervecera Unicer. Pero la pugna del grupo financiero vinculado a Banesto -entidad que tiene ambiciosos planes para Portugal, incluidas las operaciones burs¨¢tiles- encontrar¨¢ obst¨¢culos ma?ana. El empresario portugu¨¦s Belmiro de Azevedo, que controla el grupo financiero Sonae y una cadena de supermercados, opondr¨¢ resistencia a las aspiraciones del grupo luso-espa?ol por controlar los dos cargos del consejo. Azevedo adquiri¨® un mill¨®n de acciones durante la reprivatizaci¨®n y luego se hizo con paquetes dispersos para alcanzar un control pr¨®ximo al 12% al descubrir la operaci¨®n de Banesto. Azevedo ha llevado adelante una campa?a en la Prensa, acusando veladamente de control for¨¢neo a la alianza Banesto-Roquette, y apel¨® al sentimiento patri¨®tico de los accionistas menores, a quienes ha invitado por carta a una reuni¨®n previa a la junta de accionistas con el objetivo de obtener mandato para la designaci¨®n de consejeros, con la esperanza de controlar al menos uno de los dos cargos en juego. Pero -seg¨²n informa Efe desde Lisboa- Azevedo ha amenazado, si no logra sus objetivos, con impugnar la junta de accionistas de la entidad en base a una ley vigente que impide la participaci¨®n de los empleados de un banco en su junta de accionistas. En una entrevista publicada en la Prensa lisboeta, Azevedo se?ala que llegar¨ªa a acuerdos con Banesto-Roquette. Esto ha llevado a analistas del sector bancario a interpretar la batalla del jueves como el paso previo de una posible cesi¨®n a sus adversarios del 12% bajo su control a un cambio pactado.

Proceso de privatizaci¨®n

Las privatizaciones portuguesas han despertado una fuerte reacci¨®n de la izquierda, vinculada, a la nacionalizaci¨®n de 1974, y ha levantado cr¨ªticas de los ex accionistas de las sociedades ahora reprivatizadas, que exigen compensaciones al valor actualizado de mercado de los bienes. Una parte del empresariado portugu¨¦s se ha negado por este motivo a intervenir en las reprivatizaciones, se?al¨® Jaime de Lacerda, miembro de la Confederaci¨®n de la Industria de Portugal. Los accionistas privados que han entrado al banco en la reciente colocaci¨®n de acciones tienen derecho a dos consejeros por el 49% del capital. Diversos grupos espa?oles han manifestado inter¨¦s por entrar en las reprivatizaciones portuguesas.La pol¨¦mica suscitada por las reprivatizaciones dio pie a una fuerte intervenci¨®n del Movimiento para la Defensa de los Accionistas, que solicita la entrega de acciones preferentes a los ex accionistas en las empresas que se reprivaticen. La posici¨®n del Gobierno ante el problema en las semanas recientes ha sido que la reprivatizaci¨®n ayudar¨¢ a subsanar el d¨¦ficit del Estado y a tener una industria m¨¢s eficiente. El ministro de Econom¨ªa, Miguel Ribeiro, Cardilhe, dijo recientemente en Lisboa que "Portugal no est¨¢ en condiciones de pagar compensaciones al valor actual de mercado de los bienes reprivatizados".