Unas cartas halladas en EEUU ofrecen una nueva visi¨®n de Hemingway y de su m¨¦todo de trabajo
Un juez de Sacramento adquiere un lote de material literario que permaneci¨® 50 a?os en un armario
Una serie de cartas personales in¨¦ditas y una copia en papel carb¨®n de la obra original del escritor norteamericano Ernest Hemingway (1.899-1961) Las verdes colinas de ?frica han aparecido en Estados Unidos, al tiempo que han sido adquiridas por un coleccionista de Sacramento (California). El material, cuya existencia ha trascendido ahora, fue hallado hace dos a?os en el interior de un armario de una casa de Carolina del Norte, propiedad de la familia de la mujer que pas¨® a m¨¢quina los apuntes originales de aquella obra maestra de Hemingway. El material ofrece una nueva visi¨®n del Hemingway real y, seg¨²n su propietario, "abre nuevas v¨ªas de investigaci¨®n sobre su compleja personalidad y sistema de trabajo".
El coleccionista que se ha hecho con la copia de Las verdes colinas de ?frica y las cartas del esritor es David Meeker, un juez especializado en administrativo de Sacramento, capital del Estado de California. En declaraciones a EL PAIS, el propio Meeker ha explicado que la correspondencia a la que ha tenido acceso "es un conjunto de cartas que el propio escritor envi¨® a Richard Armstrong".Armstrong era un periodista amigo personal de Hemingway, al que conoci¨® en Cuba mientras trabajaba para el International News Service (INS). Su esposa Jane, entonces una empleada del Departamento de Estado, fue la persona que pas¨® en limpio y a m¨¢quina la obra de Hemingway y quien conserv¨® durante 50 a?os la copia de carb¨®n que ha aparecido ahora. Seg¨²n Meeker, las otras copias transcritas de Las verdes colinas de ?frica se hallan en la Biblioteca John F. Kennedy de Boston (Massachusetts) y en los archivos de la univesidad de Delaware.
Los Armstrong abandonaron Cuba y se instalaron en Washington, desde donde mantuvieron una larga correspondencia con el escritor. Posteriormente el matrimonio se traslad¨® a Carolina del Norte. Una hija del matrimonio Armstrong, Phyllis Gardner, fue quien rnecanografi¨® posteriormente Por qui¨¦n doblan las campanas, y su hijo, Alan Danielson, quien encontr¨® el material en un armario de su casa, 50 a?os despu¨¦s de que ¨¦ste fuera almacenado all¨ª por sus abuelos.
La pieza m¨¢s antigua de este lote que ahora obra en poder de David Meeker es un telegrama de 1934 enviado por el escritora su segunda esposa, Pauline, y la m¨¢s reciente, una carta recibida por los Armstrong en 1945. La mayor parte del material adquirido por este juez californiano cubre el per¨ªodo 1941-1942.
La colecci¨®n incluye tambi¨¦n el original de la primera copia de una corta historia -La capital del mundo-, 25 cartas escritas por Martha Gellhorn, la tercera esposa de Hemingway, y otras varias del escritor en las que hace referencia a Por qui¨¦n doblan las campanas, su obra sobre la guerra civil espa?ola, Las verdes colinas de Africa y Tener o no tener. Tambi¨¦n aparecen fotografias, recortes de peri¨®dicos, una invitaci¨®n a laboda entre el escritor y Martha Gellhorn y una cartas de Arnold Gingrich, entonces editor de Esquire, y otra de Katie Dos Passos, la esposa del escritor John Dos Passos.
Abierto y cari?oso
"En las cartas, sobre todo, aparece un Hemingway distinto al hombre cerrado que todos cre¨ªamos que era; en la correspondencia con los Armstrong aparece un hombre abierto y cari?oso en el que cuenta con claridad sus problemas y todo cuanto le pasaba, y en especial sus problemas a la hora de afrontar sus trabajos", explica Meeker.En una de las cartas a Armstrong, Hemingway le explica su proyecto de Tener o no tener, publicada en. 1937. En la carta, fechada en Cayo Oeste el 25 de julio de 1936), Hemingway solicita a su amigo informaci¨®n acerca de diferentes sucesos acontecidos en Cuba, "para este pu?etero libro en el que estoy trabajando [Tener o no tener]". En la carta Hemingway confesaba a Armstrong que el material que le solicitaba iba a ser la base de aquel libro.
El periodista le envi¨® diverso material a Florida y Hemingway lo utiliz¨® en su obra, seg¨²n ha trascendido ahora. Meeker opina que "¨¦ste es un ejemplo de la importancia de sus cartas; todas se refieren a espec¨ªficos problemas de creaci¨®n en los que [Hemingway] se hallaba inmerso".
En opini¨®n de Robert Gajdusek, un profesor de ingl¨¦s de la universidad de San Francisco, y la ¨²nica persona que ha podido ver y comprobar el material de Meeker, "es incomprensible c¨®mo la familia Armstrong no se hab¨ªa dado cuenta del gran valor hist¨®rico de este material".
Gajdusek, un estudioso sobre la vida del escritor y autor de Hemingway en Par¨ªs y El Cayo Oeste y la Cuba de Hemingway, cree "el material que se ha encontrado tiene un gran inter¨¦s para los investigadores".
Hemingway obtuvo el Premio Pulitzer en 1953 por su obra El viejo y el mar y el Premio Nobel de Literatura en 1954. Escribi¨® tambi¨¦n las novelas El verano peligroso, Hombres sin mujeres, Adi¨®s a las armas y Las nieves del Kilimanjaro.
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