Populismo en Noruega
LO VERDADERAMENTE significativo de las elecciones generales celebradas en Noruega, el pasado lunes, no es la p¨¦rdida de votos que se ha producido a derecha e izquierda del espectro pol¨ªtico (6% para los laboristas de la primera ministra en el poder, 8% para los conservadores), sino el aparentemente escalofriante avance de la derecha m¨¢s extremista. Y decimos aparentemente porque puede decirse que su fuerza es m¨¢s efimera y tiene menos visos de ser efectiva que lo que sugieren los n¨²meros. En efecto, el Partido Progresista de Carl I. Hagen -que, recogiendo el 12% de los votos, ha pasado de tener un diputado en la legislatura anterior a disponer de 22 en la presente- se convertir¨ªa en la form aci¨®n- ¨¢rbitro del poder si no fuera porque los dem¨¢s partidos conservadores (conservadores, cristiano-populares y centristas) han anunciado su rechazo de principio a formar Gobierno con ¨¦l. En tales condiciones, la primera m¨ªnistra Brundtland ha asegurado que su Partido Laborista seguir¨¢ gobernando mientras no exista otra opci¨®n m¨¢s viable y aunque tenga que hacerlo con una mayor¨ªa minoritaria que no alcanza la absoluta por apenas tres esca?os; para gobernar en esa situaci¨®n cuenta con el apoyo de los Socialistas de Izquierda y de un diputado disidente.La derecha extremista noruega, al igual que sucede c¨ªelicamente en los restantes pa¨ªses escandinavos, surge en determinados per¨ªodos como mov¨ªmiento populista de protesta, respondiendo a un sentimiento de insatisfacci¨®n en determinados sectores de la poblaci¨®n, con fen¨®menos tales como la depresi¨®n econ¨®mica, el paro o el excesivo peso del Estado del bienestar sobre el individuo. Como tal, se asemeja menos a un lepenismo racista o al simple fascismo neonazi o neofaseista que a un movimiento de desobediencia irritada al estilo del viejo poujadismo. Por buscarle un ejemplo m¨¢s cercano a. nuestras playas, podr¨ªa decirse que el Partido Progresista noruego es un ruizmate¨ªsmo a la escandinava. Y, al igual que en el c¨¦lebre postre conocido en el mundo entero como bomba noruega, tiene helado ins¨ªpido por dentro, est¨¢ recubierto de empalagoso, merengue por fuera y, al ser flambeado, arde s¨®lo por unos segundos. Dicho en otras palabras, tiene: un futuro bastante poco prometedor.
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