El coraz¨®n de Nueva York, en manos japonesas
Jap¨®n prosigue sin pausa su conquista econ¨®mica de Estados Unidos, de Hollywood a Nueva York, y acaba de apoderarse de una nueva porci¨®n de la Gran Manzana, el Rockefeller Center en pleno coraz¨®n del imperio del d¨®lar. La inmobiliaria japonesa Mitsubishi Estate Company se ha hecho con el control del Rockefeller Center de Nueva York, uno de los s¨ªmbolos del capitalismo occidental y orgullo de los norteamericanos. La compra del 51 % de las acciones de este conjunto de 19 edificios, situado en el centro de la isla de Manhattan, fue hecho p¨²blico el pasado lunes por David Rockefeller, presidente del grupo Rockefeller. La operaci¨®n, que se fij¨® en 846 millones de d¨®lares al contado, ha representado una conmoci¨®n financiera en Estados Unidos.
La multinacional japonesa Mitsubishi se hace con el control del Rockefeller Center de Nueva York
Algunos directivos del Grupo Rockefeller se han mostrado contrariados por la venta de ese paquete de acciones a una firma japonesa, a pesar de que una de las cl¨¢usulas del contrato de la compra expresa muy claramente que el Rockefeller Center seguir¨¢ funcionando del mismo modo que lo ha hecho desde su construcci¨®n, en 1934, y que sus mandos directivos seguir¨¢n ocupando sus puestos.Pese a estas reticencias internas y las cr¨ªticas de quienes piensan que EE UU no deber¨ªa venderse, pedazo a pedazo, al capital japon¨¦s, algunos analistas opinan que este tipo de operaciones demuestran la confianza de los inversores extranjeros en la solidez de la econom¨ªa norteamericana, a pesar de su gigantesco d¨¦ficit presupuestario y comercial. La compra, pues, es positiva para los que ven el mercado desde el prisma puramente financiero y no desde el punto de vista patri¨®tico, o de quienes creen fervientemente en la libertad de mercado que caracteriza el sistema de EE UU y rechazan el proteccionismo.
La Mitsubishi Estate es la mayor empresa inmobiliaria de Jap¨®n y una de las filiales m¨¢s productivas del conglomerado multinacional Mitsubishi. La compra del Rockefeller Center es uno m¨¢s de los m¨²ltiples negocios llevados a cabo por esta firma en EE UU, donde posee numerosas participaciones inmobiliarias en California y Oreg¨®n.
Koyata Hosokawa, vicepresidente ejecutivo de la Mitsubish Estate ha declarado que Estados Unidos es un buen lugar para invertir y que as¨ª lo demuestran los numerosos estudios que su compa?ia ha realizado en el terreno inmobiliario a lo largo de los ¨²ltimos a?os.
El precio del suelo en EE UU, uno de los m¨¢s altos del mundo, no es comparable con el precio que se paga por un metro cuadrado de terreno en Tokio. La Mitsubishi, que comenz¨® su particular conquista de Am¨¦rica hace un d¨¦cada, es la propietaria de la mayor parte de los edificios del ¨¢rea de Marunouchi, el Rockefeller Center de Tokio.
El anuncio de la compra del Rockefeller Center se produce un mes despu¨¦s de que la Sony Corporation conmocionara las estructuras financieras de EE UU tras su adquisici¨®n, a golpe de talonario, de la productora cinematogr¨¢fica Columbia. Tambi¨¦n han transcurrido unos pocos d¨ªas desde que el ex presidente Ronald Reagan anunciara en Tokio que ve¨ªa con buenos ojos la penetraci¨®n econ¨®mica japonesa en EE UU.
Seg¨²n David Rockefeller, de 74 a?os, uno de los dos hijos a¨²n vivos del legendario John D. Rockefeller, la transacci¨®n que ha permitido a la Mitsubishi la compra de 627.000 acciones del Rockefeller Center no alterar¨¢ el esp¨ªritu con que fue construido el famoso complejo inmobiliario, tan ¨ªntimamente ligado a la imagen de Nueva York.
El Rockefeller Center es un conjunto de 19 grandes edificios de color gris que albergan el Radio City Music Hall y otras de las perlas tur¨ªsticas y financieras de Nueva York, como son los estudios centrales de la National Broadcasting Corporation (NBC), la Time Warner, la General Electric, la Associated Press y tambi¨¦n la famosa pista de patinaje sobre hielo.
Jotaro Takagi, presidente de la Mitsubishi Estate, ha declarado que "no existe en el mundo ninguna direcci¨®n comercial que tenga la categor¨ªa del Rockefeller Center". "Hemos llevado a cabo esta inversi¨®n con el objetivo de compartir con la familia Rockefeller la visi¨®n de este centro como un lugar muy especial en Nueva York y de la propia ciudad, como la capital financiera y cultural del mundo", a?adi¨®.
Otros 'novios'
Ayer trascendi¨® que los Rockefeller eligieron a este grupo japon¨¦s antes de decidirse por varios pretendientes norteamericanos, que hab¨ªan expresado meses atr¨¢s su inter¨¦s en la compra. El propio David Rockefeller explic¨® que su compa?¨ªa hab¨ªa entablado conversaciones sobre esta venta con varias compa?¨ªas europeas y norteamericanas. Pero Rockefeller explic¨® que las relaciones entre su compa?¨ªa y su propia familia con la Mitshubishi se remontaban 20 a?os atr¨¢s, cuando ¨¦l era presidente del Chase Manhattan Corporation.
El inter¨¦s de los Rockefeller por vender parte de sus propiedades se remonta ya a 1984, cuando el grupo solt¨® el 6,5% de sus acciones. Parte de aquel paquete fue adquirido por Giovanni Agnelli, presidente de Fiat.
En 1986, los Rockefeller crearon un grupo inmobiliario -Rockefeller Properties Incorporated- que controlaba un pr¨¦stamo hipotecario de 1.300 millones de d¨®lares sobre el Rockefeller Center. El cr¨¦dito es convertible en el a?o 2000 por el 71,5% del complejo. Si el pr¨¦stamo se convirtiera, los poseedores de la hipoteca controlar¨ªan el 71,5% del Rockefeller Center, mientras Mitsubishi, los Rockefeller y otros inversores poseer¨ªan el resto.
El Grupo Rockefeller incluye el Rockefeller Center Management Corporation, el Radio City Music Hall Productions, el Rockefeller Center Development, el Rockefeller Group Telecommunications Service y la Cushman and Wakefield Incorporated.
La compra de la mayor¨ªa de las acciones de este complejo inmobiliario, situado entre las famosas Quinta Avenida y la Avenida de las Am¨¦ricas y las calles 46 y 54, no ha sorprendido en los medios inmobiliarios de Nueva York.
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