El esp¨ªritu de la calle
El numeros¨ªsimo p¨²blico que abarrotaba hasta l¨ªmites inhumanos la sala J¨¢cara se entreg¨® en coraz¨®n y alma a ese guitarrista y compositor llamado Rosendo Mercado. Vibrando desde la primera a la ¨²ltima canci¨®n, se deshac¨ªan en elogios hacia el que fuera miembro de los legendarios Le?o. "?Colega!", gritaban como inevitable coletilla de cada halago, plenamente identificados con la m¨²sica y los textos del carism¨¢tico cantante madrile?o.Y es que Rosendo s¨ª es el colega que necesitan los seguidores del rock urbano. Sin necesidad de utilizar demagogia barata, sin prepotencias propiciadas por la densidad de su carrera, sin ambiciones extramusicales o pretensiones moralistas, Rosendo hace del escenario una prolongaci¨®n del esp¨ªritu de la calle. Y el p¨²blico lo sabe, lo siente, y se integra sin esfuerzo en unas canciones en las que se ven reflejados como en un espejo. Rosendo no ha abandonado jam¨¢s el asfalto, por lo que la complicidad con sus oyentes es total.
Rosendo
Rosendo Mercado (voz y guitarra), Miguel ?ngel Jim¨¦nez (bater¨ªa), Rafael J. Vegas (bajo y coros) y Gustavo di Nobile (teclados). Sala J¨¢cara. Madrid 31 de octubre.
"Es s¨®lo una canci¨®n, / es s¨®lo un rock and roll / y as¨ª me siento mejor", canta como descarada declaraci¨®n de principios, en uno de los abundantes momentos de m¨¢xima intensidad del concierto. Acompa?ado por una banda sencilla y brillante, sudoroso y feliz como el hacinado p¨²blico, Rosendo demostr¨® que es un gran guitarrista y un compositor sincero y constante como pocos.
Los arreglos de las canciones estaban muy cuidados, las luces milimetradas, y la gente apag¨® con sus voces al mism¨ªsimo Rosendo durante temas enteros. ?nicamente fall¨® el sonido, demasiado opaco y sucio, y un local inadecuado para conciertos multitudinarios.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.