El Ayuntamiento de Barbate pretende que Defensa abandone un campo de maniobras

El alcalde de Barbate (C¨¢diz), Seraf¨ªn N¨²?ez, del PSOE, ha anunciado que presentar¨¢ una moci¨®n en el pr¨®ximo pleno municipal para solicitar al Ministerio de Defensa el desmantelamiento del campo de maniobras de la sierra del Ret¨ªn, propiedad de la Armada espa?ola, que se encuentra situado a unos tres kil¨®metros del casco urbano.La moci¨®n saldr¨¢ adelante gracias a la mayor¨ªa con que cuenta el PSOE en la corporaci¨®n municipal y supone un cambio sustancial del Ayuntamiento en torno a este asunto, ya que hasta ahora los socialistas no cuestionaban la existencia en s¨ª del campo de maniobras, sino que reclamaban el incremento de la seguridad para evitar riesgos a la poblaci¨®n, y compensaciones econ¨®micas.

Esta postura ha sido adoptada por el equipo de gobierno despu¨¦s de desarrollarse en este recinto durante la semana pasada unos ejercicios de unidades anfibias de la VI Flota norteamericana. Las maniobras fueron modificadas para satisfacer las demandas del alcalde, que hab¨ªa amenazado con encabezar acciones de boicoteo si no se introduc¨ªan cambios para evitar molestias y peligros a los ciudadanos.

Modificaciones

As¨ª, las maniobras se efectuaron sin que los convoyes militares atravesaran el n¨²cleo urbano, a diferencia de lo ocurrido en ocasiones anteriores. Los aviones y helic¨®pteros no sobrevolaron el espacio a¨¦reo del pueblo y s¨®lo se emplearon armas ligeras.Sin embargo, ahora N¨²?ez ha explicado que reclamar¨¢ las m¨¢ximas precauciones no s¨®lo con la VI Flota sino tambi¨¦n con la Armada espa?ola, que utiliza este recinto para el adiestramiento de las unidades del Tercio Sur de la Infanter¨ªa de Marina, con base en San Fernando (C¨¢diz). Adem¨¢s el alcalde ha declarado que no basta ya con reclamar a Defensa compensaciones econ¨®micas por el freno que supone al desarrollo local la existencia del campo, sino que se plantear¨¢ su desmantelamiento.

El campo de maniobras funciona desde 1.981, tras una operaci¨®n de expropiaci¨®n forzosa de las 5.300 hect¨¢reas que ocupa. Desde entonces, cinco vecinos han muerto al introducirse en el recinto y explosionarles artefactos que pretend¨ªa recoger para chatarra.