Se estrecha el cerco sobre los comunistas de la RDA

Todos los partidos del espectro pol¨ªtico legal en la RDA se unieron ayer a la exigencia de la oposici¨®n democr¨¢tica de eliminar de la Constituci¨®n el papel dirigente del partido comunista (SED). Los cuatro partidos integrados hasta ahora en el bloque con el SED -el Partido Liberal Democr¨¢tico (LDPD), el Partido Democr¨¢tico Campesino (DBD), la Uni¨®n Democristiana (CDU) y el Partido Nacionaldemocr¨¢tico (DDP)- comenzaron a pedir condiciones para su cooperaci¨®n con un partido comunista cuyo reciente pasado pesa como una losa sobre su futuro.

Mientras el partido comunista ten¨ªa que intentar convencer por primera vez en 40 a?os a las otras fuerzas pol¨ªticas a una cooperaci¨®n que antes impon¨ªa por la fuerza, se fortalec¨ªan los rumores sobre una inminente demolici¨®n del muro en la puerta de Brandeburgo, coraz¨®n de Berl¨ªn y s¨ªmbolo, primero, de la capital del imperio alem¨¢n y, despu¨¦s, de la divisi¨®n de Alemania. Sin embargo, anoche, las autoridades de la RDA informaron que ese trozo del muro no se derribar¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas.Miles de personas esperan desde el martes a ambos lados de la puerta de Brandeburgo, el comienzo de unos trabajos que ser¨¢n arduos, ya que aqu¨ª las placas est¨¢n fortificadas con bloques de hormig¨®n de hasta tres metros de grosor. Decenas de c¨¢maras de televisi¨®n de todo el mundo esperan al simb¨®lico momento en que caiga el muro en su punto internacionalmente mas c¨¦lebre, bajo la cu¨¢driga romana victoriosa de la puerta, que procede de Occidente.

Por primera vez, ayer, el LDPD expuso la posibilidad de no formar parte de una coalici¨®n de gobierno "a la vista de la falta de confianza en el SED". Como sucedi¨® en Polonia, los sat¨¦lites se distancian del partido comunista y comienzan a sugerir otras posibilidades de gobierno y poner precio a su colaboraci¨®n.

El nuevo presidente del Parlamento, Guenther Maleuda, ya hab¨ªa demandado un d¨ªa antes, con eco positivo en el propio partido comunista, la "anulaci¨®n del art¨ªculo primero de la Constituci¨®n". ?ste establece el "papel dirigente de la clase obrera y su partido". "No ser¨¢ dif¨ªcil renunciar a lo que ya no tenemos, el papel dirigente. Y que no somos ya el partido de la clase obrera que nos ha vuelto la espalda, tambi¨¦n est¨¢ claro. S¨®lo podremos recuperar un papel dirigente o relevante seg¨²n ganemos la confianza de la poblaci¨®n, y esto va para largo", dijo.

Hans Modrow ya anunci¨® que no permitir¨¢ que el partido comunista imponga su pol¨ªtica al Gobierno que ¨¦l dirija. Por otra parte, ayer se utiliz¨® por primera vez el calificativo de "criminal" para la actuaci¨®n del Gobierno dimisionario de Willy Stoph, que, seg¨²n el National Zeitung, del DDP, "viol¨® de forma criminal los preceptos constitucionales". La exigencia de responsabilidades penales contra los usufructuarios del orden inmovilista vigente hasta la ca¨ªda de Honecker el 18 de octubre se multiplican en todo el pa¨ªs, y la Prensa publica innumerables casos de abusos y corrupciones de la direcci¨®n del partido y los sindicatos oficiales (FDGB).

Las manifestaciones de los representantes de los cuatro partidos legales, que durante cuatro d¨¦cadas fueron meros sat¨¦lites del partido comunista, se producen en plena negociaci¨®n con el primer ministro, Hans Modrow, paxa la formaci¨®n de un nuevo Gobierno que debe ser presentado ma?ana al Parlamento.

Hasta ayer por la tarde, las autoridades de la RDA hab¨ªan concedido 7,7 millones de visados a sus ciudadanos para viajar a Occidente. Esto supone que, en pocos d¨ªas, la mitad de los menos de 17 millones de habitantes de la RDA contar¨¢ con su visado para viajar a Occidente.

Ayer se anunci¨® la rehabilitaci¨®n de Walter Janka, un intelectual comunista que fue una de las mas destacadas v¨ªctimas de los juicios farsa en la RDA. Janka cumpli¨® cinco a?os de prisi¨®n aciasado de un compl¨® antisocial¨ªsta por intentar sacar al fil¨®sofo Gyorgy Lukacs de Budapest durante el levantamiento h¨²ngaro de 1956. Los dirigentes que le encargaron esta operaci¨®n de rescate, a su cabeza el entonces ministro de Cultura, Johannes R. Becher, fueron sus acusadores. Janka hab¨ªa solicitado hasta hoy infructuosamente que se revisara la injusticia cometida contra ¨¦l y siempre se declar¨® un leal ciudadano de la RDA.