Pelikan: "Dubcek garantizar¨ªa a Gorbachov la permanencia en el Pacto de Varsovia"

Jiri Pelikan, responsable de la televisi¨®n checoslovaca durante la primavera de Praga, asist¨ªa el viernes a la reuni¨®n de la Intemacional Socialista en Ginebra mientras la plaza de San Wenceslao aclamaba a Alexander Dubcek, el carism¨¢tico dirigente de 1968, y la c¨²pula comunista se reun¨ªa en un pleno que acabar¨ªa despu¨¦s con su dimisi¨®n en bloque. Pelikan estaba en Ginebra porque ahora, 21 a?os despu¨¦s, figura en las filas del Partido Socialista Italiano (PSI) y es presidente del Instituto Este-Oeste de Roma.

Pelikan, cuyas pobladas cejas. recuerdan parad¨®jicamente a las de su enemigo Leonid Breznev- a la saz¨®n m¨¢ximo dirigente de la URSS, no olvida, sin embargo, su pa¨ªs, al que confiesa estar dispuesto a volver si la situaci¨®n se democratiza y si el Gobierno checoslovaco le devuelve la nacionalidad arrebatada en 1969."Si adem¨¢s de eso retiran todas las calumnias que han difundido contra m¨ª y puedo defenderme, volver¨¦ a Praga", a?adi¨®.

Breznev ya no est¨¢

Pregunta. ?Por qu¨¦ el cambio en Checoslovaquia ha llegado m¨¢s tarde que en otros pa¨ªses del Este?

Respuesta. El proceso se ha retrasado porque en el Partido Comunista Checoslovaco no hay un ala reformista, como existe en Polonia, Hungr¨ªa o la URSS, porque durante la llamada normalizaci¨®n casi medio mill¨®n de comunistas reformadores fueron excluidos del partido y de la vida p¨²blica. Por eso, las iniciativas de reforma no pueden venir de lo alto del partido, sino solamente bajo la presi¨®n de la base. Y la base ten¨ªa necesidad de cierto tiempo para despertarse porque las viejas generaciones viv¨ªan todav¨ªa bajo el choque psicol¨®gico de la intervenci¨®n militar.

Otra raz¨®n es que el nivel de vida del ciudadano checoslovaco se puede calificar de decente y los obreros no son empujados por la miseria a salir a la calle.

Adem¨¢s, la oposici¨®n ha sido bastante dispersa y a menudo limitada a los intelectuales. Solamente los ¨²ltimos acontecimientos -sobre todo, el cambio en la RDA- han influido.

P. El caso de la RDA es muy similar: la misma presi¨®nde la gente, la misma ausencia de reformadores en el partido comunista...

R. S¨ª. Sobre todo porque se sabe que en Mosc¨² no est¨¢ Breznev para amenazar con sus tanques, sino que est¨¢ Gorbachov, que no puede utilizar la fuerza contra la voluntad del pueblo.

P. ?Dubcek puede ser todav¨ªa una alternativa?

R. Si la presi¨®n de la poblaci¨®n contin¨²a, creo que Dubcek ser¨ªa una soluci¨®n ideal en el sentido de que ¨¦l puede garantizar a Gorbachov, es decir, a la direcci¨®n sovi¨¦tica, que los cambios en Checoslovaquia van a desarrollarse en el marco de la alianza del Pacto de Varsovia y del socialismo; no del socialismo real como el de hoy, sino del socialismo de rostro humano, el que quiso hacer Dubcek en 1968. Pero eso ser¨ªa posible s¨®lo en el marco de una presi¨®n. El hombre m¨¢s popular de Checoslovaquia hoy es el escritor Vaclav Havel, y tambi¨¦n monse?or Frantisek Tomasek, el cardenal arzobispo de Praga.

P. ?Pero Havel se comprometer¨ªa directamente en la pol¨ªtica?

R. S¨ª. ?l est¨¢ ya comprometido, incluso contra su voluntad. Se ha convertido en una personalidad-s¨ªmbolo. Ahora bien, no es alguien que quiera quedarse en la pol¨ªtica porque ¨¦l es escritor y querr¨ªa continuar escribiendo. Pero tampoco es un hombre de transici¨®n. Al contrario, es el hombre del futuro. Es el hombre que representa justamente la pol¨ªtica de la renovaci¨®n.

P. ?Cree que aceptar¨ªa jugar un papel en el futuro?

R. Havel podr¨ªa quiz¨¢ ser un d¨ªa presidente de la Rep¨²blica Democr¨¢tica de Checoslovaquia, pero estamos todav¨ªa lejos de eso...

Divisi¨®n en bloques

P. ?Los cambios en el Este terminar¨¢n con los bloques militares y que se llegar¨¢ a la reunificaci¨®n de Alemania?

R. Si este movimiento por la democratizaci¨®n se desarrolla en todos los pa¨ªses -por el momento, s¨®lo Ruman¨ªa est¨¢ aislada-, va a transformarlos en el sentido democr¨¢tico, con una econ¨®m¨ªa mixta, es decir, un sector privado y un sector colectivo.

Esto puede desembocar en la superaci¨®n de la divisi¨®n de Europa en dos bloques. Pero es un proceso bastante largo, porque lo que pasa no es a¨²n irreversible. Todav¨ªa el poder real -es decir, el control de la polic¨ªa y del Ej¨¦rcito- est¨¢ por todas partes en manos de la nomenklatura comunista. Y los estalinistas van a intentar invertir el desarrollo de los acontecimientos, ya sea porque esperan que Gorbachov fracase, ya sea porque desean que la crisis econ¨®mica saque a la gente a la calle y obligue al poder a utilizar a las fuerzas armadas contra el pueblo. ?se ser¨ªa el fin de la perestroika.

Si, por el contrario, todo contin¨²a bien, se producir¨¢ en el futuro, por supuesto, la disoluci¨®n del Pacto de Varsovia y de la OTAN, y en el marco del proceso de unidad de Europa habr¨¢ tambi¨¦n la posibilidad de la unificaci¨®n de Alemania, que ser¨¢ un pa¨ªs neutral que no amenazar¨¢ a nadie.