La opini¨®n de Rod¨¦s

En los ¨²ltimos d¨ªas he observado la insistencia de su peri¨®dico en dar noticias, art¨ªculos de opini¨®n e, incluso, editoriales, sobre un comentario radiof¨®nico de Jes¨²s Rod¨¦s acerca del asesinato de los jesuitas de El Salvador.Sobre el fondo del asunto, es decir, sobre las palabras de Rod¨¦s que han dado lugar a la pol¨¦mica, me parece que la argumentaci¨®n es correcta: Ellacur¨ªa y sus colaboradores estaban comprometidos en la lucha por la libertad y la justicia en El Salvador y han muerto asesinados en el fragor de la batalla; muchos otros, de nombre desconocido, han muerto y seguir¨¢n muriendo por los mismos motivos sin que nadie, m¨¢s all¨¢ de su familia y amigos, les preste atenci¨®n e ir¨¢n, como dijo Rod¨¦s, a la fosa com¨²n. Desde mi punto de vista, no hay nada que objetar a este razonamiento y estoy seguro que un hombre tan honesto como Ellacur¨ªa -que, como yo, cre¨ªa en la igualdad de todos los hombres, sea cual fuere su origen y condici¨®n- estar¨ªa de acuerdo en que este distinto trato de los medios de comunicaci¨®n es, aunque comprensible, una injusticia hist¨®rica m¨¢s.

Evidentemente inoportuno ha estado Rod¨¦s al decir que los jesu¨ªtas son una orden paramilitar ya que ello induce a confusi¨®n en el contexto de Centroam¨¦rica. Ahora bien, es cierto que en la idea inicial de San Ignacio los miembros de esta orden son "soldados de Cristo" y ¨¦ste, supongo, es el origen de la ciertamente desafortunada frase de Rod¨¦s.

Al margen ya del contenido del comentario radiof¨®nico, me parece sencillamente demencial que s¨®lo sobre la base del mismo se pida, sin m¨¢s, la dimisi¨®n de Rod¨¦s de un cargo p¨²blico -el de director de la Escuela de Polic¨ªa de Catalu?a- cuyo ejercicio no tiene relaci¨®n con el tema del comentario. Me parecer¨ªa bien que EL PAIS pidiera esta dimisi¨®n despu¨¦s de haber analizado la labor de Rod¨¦s como director de la escuela y haber llegado a conclusiones negativas. Pero no comprendo que un mero comentario hecho en el uso del derecho a la libertad de expresi¨®n compartible o criticable, oportuno o inoportuno- sobre una materia ajena al cargo, justifique la petici¨®n de dimisi¨®n.