La telenovela dram¨¢tica ¡®Cristal¡¯ empieza a emitirse en TVE-1

Con el tema musical de fondo Mi vida eres t¨², interpretado por Rudy la Scala, comienzan hoy en TVE-1 las dram¨¢ticas cuitas de Cristal, esta nueva hero¨ªna de telenovela que llega esta vez servida por Radio Caracas Televisi¨®n, una de las antiguas emisoras de este pa¨ªs que ha doblado en un a?o su n¨²mero de estaciones televisivas y que contin¨²a teniendo en las llamadas novelas uno de los m¨¢s s¨®lidos sostenes de la programaci¨®n. Escrita por Delia Fiallo, una veterana autora del follet¨®n en Latinoam¨¦rica, Cristal vuelve a colocar el motor de la acci¨®n narrativa en el t¨®pico del hijo natural y las distancias de clase.

Cristal queda embarazada de Luis Alfredo (Carlos Mata), infelizmente casado con otra porque Victoria G¨®mez (Lupita Ferrer), su madrastra, dominante y poderosa due?a de una casa de modas, se opuso al romance. Lo que no sabe Victoria, y aqu¨ª est¨¢ el nudo del dolor y el conflicto, es que Cristal (Jeanette Rodr¨ªguez), empleada como modelo en su empresa, es el beb¨¦ que ella abandon¨® cuando era pobre criada reci¨¦n llegada de provincias. Como telenovela, Cristal est¨¢ mucho m¨¢s cerca de los radiogramas (seriales radiof¨®nicos), que fueron un aut¨¦ntico fen¨®meno de masas en Latinoam¨¦rica hasta la popularizaci¨®n de la televisi¨®n. El legendario El derecho de nacer, de F¨¦lix B. Caignet, ya planteaba t¨®picos b¨¢sicos que despu¨¦s se repetir¨¢n con diversas variaciones, como puedan serlo aqu¨ª el hecho de que est¨¦ m¨¢s presente el mundo del trabajo -la casa de modas de Victoria- y la independencia y autonom¨ªa de la mujer. Se cuenta que Caignet contest¨® en Cuba a Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez cuando ¨¦ste le pregunt¨® a qu¨¦ atribu¨ªa su ¨¦xito: "Mire, yo parto de la base de que la gente quiere llorar. Y yo s¨®lo les doy el pretexto".

Augusto Marzagao, que ha comercializado en el mundo de los seriales a la mexicana Televisa, dec¨ªa por su parte que, si bien las telenovelas brasile?as eran est¨¦ticamente superiores, las de Televisa -y aqu¨ª pueden sumarse tambi¨¦n las de Argentina, Puerto Rico o Venezuela- "son m¨¢s comprensibles para las masas. Globo, en Brasil, usa muchas intrigas secundarias e historias dentro de la historia, mientras que nuestros guiones son m¨¢s directos y con temas m¨¢s universales".

Valent¨ªn Pimstein, productor de Televisa, a¨²n encuentra mayores especificidades, en este caso respecto al serial norteamericano: "Las telenovelas americanas resuelven un problema por episodio y dejan otros pendientes para el pr¨®ximo cap¨ªtulo. En Latinoam¨¦rica los problemas nunca se resuelven en un s¨®lo cap¨ªtulo".

Para Delia Fiallo, cuya carrera empez¨® en Cuba en 1946, los cambios m¨¢s notables en las nuevas telenovelas son su esp¨ªritu de emulaci¨®n de las grandes soaps norteamericanas -Dallas, Dinast¨ªa-, el mayor uso de exteriores, los temas m¨¢s crudos y los personajes m¨¢s j¨®venes. "Antes", dice Delia Fiallo, "eran m¨¢s rom¨¢nticas y escapistas. No pod¨ªamos tocar ciertos temas. En 1968, me suspendieron una de mis novelas por tratar sobre el divorcio". Las cosas empezaron a cambiar, seg¨²n Fiallo, a partir de finales de los 70, con la incorporaci¨®n a la escritura de telenovelas intelectuales de izquierda, que si bien fracasaron al no poder medrar en el mercado, consiguieron sin embargo liberalizarlo.