S¨®lo 1.000 de los 22.000 coches matriculados cada mes tienen asegurada la plaza de garaje

"Particular vende Ford Fiesta 1.100. Pocos kil¨®metros. 750.000 pesetas". "Compro plaza garaje, zona Centro. Hasta 3.000.000". Dejar el coche en Madrid durante la noche o las horas de trabajo se ha convertido en una de las figuras estrella de la ley de la oferta y la demanda. Cada mes se matriculan 22.000 veh¨ªculos nuevos, mientras el crecimiento de plazas municipales de apareamiento apenas supera el millar.

Ni los t¨¦cnicos municipales saben a ciencia cierta cu¨¢ntos veh¨ªculos circulan por Madrid.Tampoco saben con exactitud cu¨¢ntas plazas de garaje existen en superficie junto a los bordillos- ni cu¨¢ntas en garajes privados. Por un lado, los datos municipales est¨¢n desfasados, y, por otro, diariamente hay medio mill¨®n de personas en otros tantos veh¨ªculos -s¨®lo un peque?o n¨²mero es utilizado por dos personas- que atraviesan por las ma?anas el l¨ªmite del t¨¦rmino municipal de Madrid para, acabada su jornada, realizar el mismo itinerario en sentido inverso.

Los 2.000 kil¨®metros de capitales, los 21.137 garajes privados censados, los 122 aparcamientos de residentes en servicio, en construcci¨®n, adjudicados o en concurso y los 29 aparcamientos p¨²blicos de concesi¨®n raunicipal ser¨ªan suficientes para los 700.000 u 800.000 veh¨ªculos que se mueven y duermen en Madrid.

De hecho, los problemas disminuyen por la noche, cuando los veh¨ªculos se reparten entre garajes y plazas de bordillo. El conflicto surge por el d¨ªa. Los siete distritos centrales sufren el tr¨¢fico diario de la mayor parte del parque automovil¨ªstico madrile?o, mientras muchos barrios de la periferia quedan casi vac¨ªos. Los veh¨ªculos proliferan como setas y los conductores se disputan no s¨®lo un hueco junto a la acera, sino tambi¨¦n en la doble y hasta triple fila que se forma en numerosas calles.

La lucha por el espacio

En esta lucha participan hasta los vecinos que tienen asegurada una plaza. Un ejemplo: en toda la zona urbana afectada por la Operaci¨®n de Regulaci¨®n de Aparcamiento (ORA) existen 45.000 plazas en la calle y 50.000 tarjertas de residentes. ?D¨®nde se meten entonces esos 5.000 veh¨ªculos todas las noches? Respuesta: "En sus garajes. Est¨¢ comprobado que hay due?os de plazas de garade que a?o tras a?o adquieren su tarjeta de residente, que ahora vale poco m¨¢s de 2.500 pesetas anuales"., afirma Jos¨¦ Manuel Pradillo, director de servicios delArea de Circulaci¨®n y Transportes. "As¨ª se evitan tener que llevar el coche al garaje durante el d¨ªa".Con el fin de evitar esta lucha, numerosos madrile?os buscan enterrar su veh¨ªculo. Aunque sea temporalmente. Ocupar una de las 13.200 plazas que suman los 29 aparcamientos p¨²bl¨ªcos repartidos por la zona central costar¨¢ a partir de enero 110 pesetas. Pero este sistema no satisface a quien busca. una plaza durante varias horas diarias.

Para ello se exige primero tener un cierto nivel econ¨®mico. El alquiler de una plaza dentro de la almendra, espacio delimitado por la M-30, se sit¨²a entre las 10.000 y las 15.000 pesetas al mes. La compra oscila entre 1,5 millones de pesetas y cuatro millones, pues depende de la zona o de la posibilidad de que en las proximidades sea construido un aparcamiento para residentes. A quienes no puedan pagar estas cantidades s¨®lo les queda confiar en ser uno de los 12.000 madrile?os beneficiados por el Plan de Aparcamiento para Residentes (PAR).

Hoy existen 65 aparcamientos para residentes, con un total de 17.269 plazas, y otros 57 se encuentran en diversas fases de construcci¨®n. El precio medio de estas plazas es de 850.000 pesetas, aunque los hay de 700.000 y de 1.200.000 pesetas, precio ¨¦ste al que han salido los de Ortega y Gasset y Rosales.