Dinescu: "Los tontos se atra¨ªan como imanes"
El poeta y disidente rumano cree que los escritores son una coartada moral para el nuevo Gobierno
Mircea Dinescu, poeta y disidente rumano, despu¨¦s de permanecer 10 meses en arresto domiciliario, tuvo sus primeros 10 minutos de gloria tras la ca¨ªda del dictador, Nicolae Ceaucescu, cuando anunci¨®, el pasado 22 de diciembre, en la televisi¨®n de su pa¨ªs: "Dios ha dirigido su mirada al pueblo rumano; el tirano ha desaparecido y el poder se halla en manos del pueblo". A continuaci¨®n acept¨® formar parte del Frente de Salvaci¨®n Nacional, que gobierna Ruman¨ªa, aunque no entr¨® en el Gabinete.
Mircea Dinescu ser¨¢ presidente de la Asociaci¨®n de Escritores durante los tres meses pr¨®ximos. "Se puede decir que voy a ser presidente de verdad de la Asociaci¨®n tanto como aut¨¦ntico es este caf¨¦ que estamos tomando", dice el poeta con una sonrisa. En la entrevista que concede en el espacioso despacho de lo que en su d¨ªa debi¨® ser la residencia de un miembro de la aristocracia rumana, Dinescu habla por los codos, gesticula animadamente y frunce el ce?o con especial delectaci¨®n.El disidente fue puesto bajo arresto domiciliario en marzo pasado por haber concedido una entrevista al diario franc¨¦s Lib¨¦ration. Y lo primero que supo de la insurrecci¨®n popular que derroc¨® a Ceaucescu fue el estr¨¦pito que se o¨ªa desde la calle. "Al principio no me dejaban salir. Pero el embajador holand¨¦s logr¨® abrirse paso a trav¨¦s de los guardias de la Securitate que me custodiaban hasta llegar a mi puerta. Le o¨ª gritar: 'Mircea, Ceaucescu ha muerto'. Entonces pude yo asomarme para decirle al guardia que el dictador hab¨ªa desaparecido, y el agente me respondi¨®: 'No es posible. Antes tenemos que morir todos nosotros para que muera Ceaucescu'. Tuve que esperar a¨²n una media hora hasta que un vecino vino y me dijo que el guardia hab¨ªa abandonado su puesto. La calle enfrente de mi casa estaba vac¨ªa, pero en una avenida pr¨®xima se apelotonaban miles de personas entre los blindados".
"Cuando me acercaba, uno de la multitud me reconoci¨®, y antes de que me diera cuenta ya me hab¨ªan izado sobre uno de los tanques con una bandera rumana en la mano. Nos dirigimos entonces a la televisi¨®n, donde se me invit¨® a tomar la palabra. As¨ª es c¨®mo ocurri¨® todo".
Mircea Dinescu explica que los escritores hab¨ªan formado una especie de organizaci¨®n subversiva, que escrib¨ªa en c¨®digo, de forma que los lectores ten¨ªan que leer entre l¨ªneas para saber lo que realmente quer¨ªan decir. "Los censores dejaban pasar esos trabajos porque eran demasiado est¨²pidos para entender lo que ten¨ªan entre las manos. ?sta ha sido una dictadura de analfabetos. Los tontos se atra¨ªan entre s¨ª como imanes, de forma que se materializaba una especie de se lecci¨®n natural de la estupidez para dirigir el pa¨ªs".
Los poetas rumanos son conocidos internacionalmente, dice Dinescu, porque sus poemas han sido frecuentemente difundidos en las emisiones en rumano de muchas emisoras extranjeras. "Nosotros los escritores somos una especie de coartada moral del Gobierno. Estamos aqu¨ª para mejorar la imagen del Frente Nacional, pero no s¨¦ realmente si desde un punto de vista pol¨ªtico nuestra presencia es realmente apreciada, porque lo nuestro es figurar siempre en la oposici¨®n. Aunque se me pidi¨® que entrara en el Frente en parte por mi juventud, yo me considero un veterano disidente pol¨ªtico".
Dinescu afirma que no hay ning¨²n peligro de que la vieja guardia del comunismo rumano se perpet¨²e en las estructuras del nuevo poder. Aunque s¨ª es cierto anadi¨®, que hab¨ªa todav¨ªa muchos comunistas partidarios de Ceaucescu que se hallaban en libertad. "D¨¦jeme que le d¨¦ un ejemplo. Dulea, segundo del Ministerio de. Cultura y jefe de la censura, es un delincuente. Cuando estall¨® la revoluci¨®n, lo que hizo fue colocarse una banda en el brazo, se present¨® ante su jefe y le dijo: 'Ahora yo represento al pueblo. D¨¦jeme su sitio".
"Hay muchos casos como ¨¦se", dice el poeta, "pero espero que mientras la Prensa pueda ser libre y todo el mundo tenga derecho a expresarse libremente ese tipo de individuos no aguantar¨¢ en el poder mucho tiempo".
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