'La Venus del espejo', en el Prado

La Venus del espejo, obra de Vel¨¢zquez pintada entre 1648 y 1651 considerada una obra maestra del pintor sevillano, lleg¨® ayer a Madrid procedente de la National Gallery de Londres. El viaje del cuadro, custodiado por el conservador brit¨¢nico Michael Helston, estuvo rodeado de grandes medidas de seguridad. Al mismo tiempo que La Venus del espejo llegaron La fragua de Vulcano, Cristo en casa de Marta y Mar¨ªa, Mariana de Austria y el marco que proteger¨¢ el retrato del Conde duque de Olivares.

Con una puntualidad seguramente adquirida en su ausencia de Espa?a, La Venus del espejo lleg¨® al Museo del Prado a las 7.30, precedida de un importante aparato de seguridad compuesto de cuatro coches de polic¨ªa y un helic¨®ptero que sobrevolaba el helado cielo del madrile?o paseo del Prado. Acudi¨® en un enorme remolque que compart¨ªa con Mariana de Austria, La fragua de Vulcano y Cristo en casa de Marta y Mar¨ªa.La Venus del espejo descendi¨® la primera, cuando a¨²n la Luna y el planeta de su mismo nombre tuvieron tiempo de saludarla. Eran las 7.50 cuando "nuestra diosa", en palabras de Michael Helston, conservador de la National Galery y courrier del viaje, entr¨® por la puerta de Vel¨¢zquez. Las c¨¢maras de televisi¨®n y los flashes de prensa recog¨ªan el momento como si se tratara de una estrella de cine, aunque el cuadro se zafaba a toda curiosidad dentro de su embalaje especialmente dise?ado por Mat Securitas Express. En su breve recorrido hasta los dep¨®sitos, en los que entrar¨ªa con tres operarios y la inseparable compa?¨ªa del se?or Helston, le flanquearon el paso La muerte de Eur¨ªdice y Jas¨®n con el vellocino de oro, de Erasmo Guellinus, y despu¨¦s pas¨® ante San Mateo y dobl¨® hacia su retiro frente al cuadro Lapitas y centauros, ambos de Rubens.

La ansiedad de fot¨®grafos y c¨¢maras porque el embalaje fuera abierto y lograr la instant¨¢nea del d¨ªa no pudo cumplirse, puesto que, como inform¨® Helston, "los acuerdos internacionales prev¨¦n que un cuadro debe permanecer al menos 24 horas en su embalaje en el sitio de destino, a fin de aclimatarse en mejores condiciones al nuevo ambiente".

?sta es la segunda visita de La Venus del espejo a Madrid, despu¨¦s de la realizada en 1960 para la exposici¨®n que se celebr¨® en el palacio de Vel¨¢zquez, en el Retiro madrile?o. Ayer, acudieron a recibirla por parte del Museo del Prado su subdirectora, Manuela Mena, y la restauradora de varias obras de Vel¨¢zquez, Mar¨ªa D¨¢vila.