Juan con tierra

Corral de la Parra, SA, una de las empresas inmobiliarias de Juan Guerra Gonz¨¢lez, es la propietaria de la finca La Zamarrona, seg¨²n afirma uno de sus socios. La empresa atribuye a esa finca una extensi¨®n de 350 hect¨¢reas, si bien los alcaldes de la zona estiman que llega a las 1.000. Aunque se tenga en cuenta s¨®lo la estimaci¨®n m¨¢s baja, esa finca es 135 hect¨¢reas m¨¢s grande que el recinto destinado a la Expo 92.La Zamarrona no est¨¢ en un lugar tan interesante como el de la Expo: se encuentra en El Pedroso, a 80 kil¨®metros de la capital de Andaluc¨ªa. Seg¨²n la versi¨®n de tres alcaldes de la comarca, se ver¨¢ afectada por la construcci¨®n del pantano de Los Melonares, por lo que parte de ella tendr¨¢ que ser expropiada. Agua, conversi¨®n de secano en regad¨ªo y la posibilidad de tina playa -artificial explican el inter¨¦s econ¨®mico adicional de la operaci¨®n. Oficialmente, la Confederaci¨®n Hidrogr¨¢fica del Guadalquivir -organismo encargado de la supervisi¨®n del pantano-, se limita a indicar que el proyecto se encuentra en fase de ejecuci¨®n y no puede facilitar detalles del mismo.

Corral de la Parra, una de las cinco sociedades donde Juan Guerra tiene participaci¨®n directa, es tambi¨¦n propietaria de otra finca: Rancho Reina, de 97 hect¨¢reas, situada en Mor¨®n de la Frontera.

Las otras dos fincas adquiridas por empresas vinculadas a Juan Guerra son La Carrascosa, en el t¨¦rmino municipal de Gilillena, y Las Brujas, en Espartinas. La primera, de 52 hect¨¢reas, fue comprada a la Empresa Nacional Sider¨²rgica (Ensidesa) por 20 millones de pesetas en 1988, cuando ocho a?os antes estaba valorada en 52 millones. Fracosur, la empresa que la adquiri¨®, se constituy¨® 24 d¨ªas antes de cerrar la operaci¨®n, seg¨²n confirm¨® en su d¨ªa un portavoz de Ensidesa.

Actual domicilio

En cuanto a la finca Las Brujas, de 30 hect¨¢reas, es actualmente el domicilio particular de Juan Guerra. En ella tiene un chal¨¦ de 400 metros cuadrados. Esta propiedad fue comprada a mediados de 1989 por 80 millones de pesetas al director de la academia preuniversitaria de Hell¨®polis, Salvador Gonz¨¢lez P¨¦rez.

Esta finca, comprada a mediados de 1989, ha creado problemas indirectos a los vecinos de Espartinas, localidad en la que existen varias urbanizaciones. Juan Guerra tuvo el desliz de construir unas naves sin licencia _municipal, al parecer destinadas a cuadras, lo cual provoc¨® una fulminante orden de la alcaldesa, Mar¨ªa Regla Jim¨¦nez -del Partido Popular- a la Polic¨ªa Municipal para que revisara chal¨¦ por chal¨¦, por si se hab¨ªan acometido otras obras sin permiso.En muy pocos a?os, y sobre todo a partir de 1986, Juan Guerra ha adquirido en la provincia de Sevilla al menos seis inmuebles. Pisos que hasta hace unos a?os costaban dos o tres millones de pesetas se han beneficiado de la especulaci¨®n y de las expectativas creadas por la celebraci¨®n de la Expo -92. El que compr¨® hace cuatro a?os puede considerarse, sin ninguna duda, un afortunado: Juan Guerra es uno de ellos.

Lo de menos es el modesto piso, situado en la calle de Pedro P¨¦rez Fern¨¢ndez, n¨²mero 1, de Sevilla, que adquiri¨® al vi cepresidente del Gobierno. Existe un segundo piso en Jard¨ªn de Atalaya -donde reside su ex mujer- y un tercero en Jard¨ªn de Capuchinos, a los que hay que sumar una plaza de garaje en Jard¨ªn de Capuchinos, dos solares en las calles Monsalves y Fresa, y el alquiler de un local comercial en la puerta de Jerez, en pleno coraz¨®n de Sevilla, por el que abona 120.000 pesetas mensuales. No se ha podido comprobar un dato reiterado por la Prensa, seg¨²n el cual es due?o de otro piso, en el n¨²mero 15 de la calle de Colombia.

El hermano de Alfonso Guerra dispone de otros bienes: caballos -un m¨ªnimo de cinco- y tres autom¨®viles: un Mercedes 300-E (con un coste de m¨¢s de cinco millones y medio de pesetas), un Audi 100 (unos tres millones y medio) y un Nissan Patrol (m¨¢s de tres millones).