Siria, ante la llamada de la 'perestroika'
Asad est¨¢ convencido de que puede afrontar los cambios internacionales sin reformas internas

"No somos un sat¨¦lite de la Uni¨®n Sovi¨¦tica", se apresura a precisar el funcionario sirio a la periodista ante la pregunta del posible efecto que puedan tener en su pa¨ªs los recientes cambios en Europa del Este. La cuesti¨®n, repetida una y mil veces durante las ¨²ltimas semanas, a¨²n no ha tenido, sin embargo, una respuesta definitiva en el terreno de las realizaciones pol¨ªticas. Mientras en un Damasco lleno de rumores los ambientes m¨¢s liberales se hacen ilusiones sobre las ventajas de un eventual contagio, las autoridades compaginan ges tos de flexibilidad con el mantenimiento de la esencia del r¨¦gimen.
Tras haber aclarado la "completa independencia" de su pa¨ªs en las decisiones pol¨ªticas, el funcionario, que habla bajo condici¨®n de anonimato, explica las diferencias en los casos de Siria y el bloque socialista. Destaca, en primer lugar, que su pa¨ªs est¨¢ gobernado por una coalici¨®n, el Frente Nacional Progresista. Adem¨¢s, manifiesta, "de acuerdo con la Constituci¨®n, el sector privado es sagrado, y ¨¦stos son los dos principales objetivos de la perestroika". El r¨¦gimen que preside Hafez el Asad se muestra convencido de su capacidad de adaptaci¨®n a las consecuencias de la nueva distensi¨®n global, sin necesidad de emular las reformas que la han generado.La fuente olvida mencionar, no obstante, que el multipartidismo se limita a los grupos autorizados oficialmente, con un papel de comparsas del dirigente partido Baaz. Tampoco aclara que la actividad privada se encuentra acogotada por unas normas r¨ªgidas que no tienen en considera ci¨®n la situaci¨®n real de la econom¨ªa. "Nuestras relaciones con la Uni¨®n Sovi¨¦tica son fuertes y buenas", se insiste en todos los niveles oficiales, pero las consecuencias de la perestroika en pol¨ªtica exterior est¨¢n empezando a tener repercusiones en una alianza que nadie cuestiona.
La actitud siria de convertirse en vanguardia de la defensa de la causa palestina se ha traducido en su aspiraci¨®n de conseguir una paridad estrat¨¦gica con Israel. "Todav¨ªa lo pedimos", asegura una fuente oficial; "a menos que seamos fuertes, no podremos conseguir una paz total". Hace ya casi un a?o que Mosc¨² dej¨® claro que la era de la confrontaci¨®n hab¨ªa terminado y que, aunque est¨¢ dispuesto a mantener la capacidad defensiva siria, hay que cambiar el concepto de equilibrio defuerzas por el de equilibrio de intereses. Por otro lado, la URSS ha decidido hacer su cooperaci¨®n m¨¢s aprovechable, no s¨®lo en lo que respecta a Siria, sino a todos los pa¨ªses del Tercer Mundo, tal como explica el n¨²mero dos de la Embajada sovi¨¦tica en Damasco, Igor Melijov.
Pago en divisas
En este contexto, el Kremlin ha empezado a solicitar el pago en divisas de las compras de armamento. Tambi¨¦n se ha especulado con una reducci¨®n del n¨²mero de consejeros militares, hecho que ambos lados desmienten. "Nos gustar¨ªa extender el desarme y la coexistencia pac¨ªfica a Oriente Pr¨®ximo", manifiesta Melijov, "pero Israel contin¨²a siendo el mayor obst¨¢culo".
As¨ª que deseamos que el sistema de defensa sirio no dafte la estabilidad en la regi¨®n, sino que genere m¨¢s, para lo cual debe imponer respeto al enemigo". Melijov evita de cualquier forma referirse al concepto de paridad estrat¨¦gica.
A pesar de lo que el diplom¨¢tico sovi¨¦tico califica de "nuevos elementos aportados por la perestroika", insiste en que Siria sigue siendo su principal interlocutor en Oriente Pr¨®ximo, y que "periodistas, diplom¨¢ticos y pol¨ªticos han tratado de exagerar" las diferencias aparecidas en sus relaciones. Melijov reconoce que "Damasco se encontraba entre las capitales que no estaban preparadas para los nuevos puntos de vista de la Uni¨®n Sovi¨¦tica en la zona", pero asegura que han logrado convencerles.
Entre los s¨ªntomas que apoyan esta tesis, Mosc¨² menciona el proceso de normalizaci¨®n de relaciones con la Organizaci¨®n para la Liberaci¨®n de Palestina, su actitud positiva hacia el acuerdo de Taif o la normalizaci¨®n de relaciones con Egipto. Respecto a la m¨¢s lejana reconciliaci¨®n con Irak, Melijov le atribuye esfuerzos que no han tenido contrapartida desde Bagdad. Incluso en el m¨¢s delicado asunto de la confrontaci¨®n con Israel parece haberse producido una suavizaci¨®n en la ret¨®rica. Aunque las autoridades de Damasco niegan con rotundidad que est¨¦n manteniendo ning¨²n tipo de contactos informales con Tel Aviv, admiten que el establecimiento de relaciones diplom¨¢ticas con Israel por parte de los pa¨ªses de Europa del Este puede tener "un efecto positivo como factor de presi¨®n".
Voces amigas
?C¨®mo podemos oponemos, si hay un pa¨ªs ¨¢rabe que ya mantiene lazos con Israel?", se pregunta un alto cargo del Ministerio de Informaci¨®n sirio, el cual -en un inusitado arranque de apertura- se enzarza en un discurso alineado con la ola de distensi¨®n. "Las guerras no llevan a ninguna parte, m¨¢s que a la cat¨¢strofe de los implicados. Ahora que en el mundo la mayor¨ªa de los conflictos se est¨¢n resolviendo pac¨ªficamente, es importante que voces amigas puedan servir de puente hacia el enemigo. Si le boicotean, no pueden ayudar".
Estos s¨ªntomas positivos no han tenido hasta el momento un paralelo en la situaci¨®n externa del pa¨ªs, el r¨¦gimen m¨¢s fuerte del mundo ¨¢rabe. A pesar de las dificultades econ¨®rnicas, el nivel del estrato m¨¢s pobre de la sociedad siria es m¨¢s alto que el de la mayor¨ªa de los pa¨ªses del Tercer Mundo. "El Gobierno se preocupa de que lo b¨¢sico est¨¦ al alcance de toda la poblaci¨®n", declara un occidental experto en econom¨ªa. La misma fuente desmiente que la rumoreada ampliaci¨®n del Frente Nacional, la pr¨®xima convocatoria de la conferencia regional del partido Baaz o un intuido incremento en el debate parlamentario sean signos suficientes para prever una apertura pol¨ªtica o econ¨®mica de Siria.
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