La editorial Julio Ollero abre con dibujos de Bellini

P. S.Ha llegado el momento en que los editores de libros de arte se unen para publicar obras que de otra forma resultan inaccesibles. Por ejemplo, una obra que es el resultado de 10 a?os de trabajo sobre el renacentista Jacopo Bellini y cuyas t¨¦cnicas fotogr¨¢ficas suponen una suerte de restauraci¨®n. Esta es la obra que ha escogido el editor Julio Ollero para la fundaci¨®n de la editorial que lleva su nombre y con la que se incorpora al minoritario club de los editores de arte. Tambi¨¦n editar¨¢ la revista de bibliofilia Esopo y coedita la revista de arte Creaci¨®n, presentada ayer.

Los editores pactan un idioma internacional, el ingl¨¦s; un pa¨ªs con un sistema de impresi¨®n econ¨®micamente competitivo y t¨¦cnicamente indiscutible, Jap¨®n; se reparten los costos, y salen a un mercado internacional de libros de arte en el que la calidad es el primer requisito.Jacopo Bellini fue el padre de dos famosos pintores, Giovanni y Gentile, y suegro de Andrea Mantegna, y una buena parte de su obra qued¨® destruida en incendios, de forma que hoy se le conoce por los cerca de 300 dibujos que han sobrevivido en dos cuadernos, sobre papel y sobre pergamino, y que se conservan principalmente en el British Museum y el Louvre. La suciedad que recubre estos dibujos casi no permite verlos, pero las fotograf¨ªas realizadas con rayos infrarrojos descubren los dibujos bajo el mugre.

Toda vez que los costos de una edici¨®n de este tipo son muy altos, y el p¨²blico comprador, comparativamente reducido, la asociaci¨®n es obligatoria. Para la impresi¨®n de este libro, Julio Ollero se ha asociado con las editoriales Dumont, Nathan, Leonardo, y British Museum, que reproducen la obra compilada y estudiada por Colin Eisler y realizada por Harey N. Abrams, de Nueva York.

La edici¨®n de libros de arte tiene unas reglas m¨¢s concretas que las de otras especialidades. Es un campo relativamente por descubrir, pues si existen innumerables libros sobre Vel¨¢zquez, los Impresionistas o Goya, a¨²n quedan magn¨ªficos autores casi in¨¦ditos. Los dos libros que editar¨¢ seguidamente Julio Ollero ser¨¢n el cat¨¢logo en espa?ol de la gran antol¨®gica sobre Van Gogh en Holanda (costar¨¢ 17.000 pesetas), y para el oto?o, una gran obra sobre Egon Schiele, pintor que suscita un inter¨¦s progresivo.

En el germen de lo que con el tiempo pretende convertirse en una editorial no especializada, Julio Ollero coedita con el Instituto de las artes la revista Creaci¨®n, y otra trimestral de bibliofilia llamada Esapo, hermana de la milanesa del mismo nombre. El primer n¨²mero publicar¨¢ un art¨ªculo de Umberto Eco sobre El exta?o caso de la Hanao (1609), en el que habla de cierta edici¨®n de un libro de alquima cuyos ejemplares difieren. Esopo publica igualmente un art¨ªculo de Sciascia.

Julio Ollero, de 37 a?os, comenz¨® a los 14 en el mundo editorial. Entre otros trabajos editoriales, fue el responsable del lanzamiento de la editorial Mondadori en Espa?a.