Cuando la palabra comunista se convierte en insulto

X. M. La palabra comunista ha ca¨ªdo en un absoluto descr¨¦dito en el Este, a juzgar por lo o¨ªdo en Par¨ªs. En un par de ocasiones, hubo cierta tensi¨®n cuando un escritor acus¨® a otro de tener "actitudes comunistas". El acusado, en ambos casos, reaccion¨® como si lo hubieran insultado de la peor de las maneras.

El enfrentamiento m¨¢s destacado ocurri¨® en el debate sobre literatura en Checoslovaquia. La estrella era Bohumil Hrabal, pero otro escritor, Pavel Reznicek -tiene un libro publicado en Francia y ninguno en Checoslovaquia- se empeno en robarle el protagonismo. Para empezar, Reznicek lleg¨® al auditorio del Grand Palais con una cogorza impresionante y con una reserva de seis cervezas bajo el brazo.

Reznicek, en un tono jocoso, no ces¨® de interrumpir y de proclamar a gritos sus desavenencias. Hrabal, que se sentaba a su lado, capeaba el temporal corrio pod¨ªa y asent¨ªa con una sonrisa cuando Reznicek proclamaba que ambos eran grandes amigos y que frecuentaban la misma taberna de Praga. Cuando las cosas empeoraban, Hrabal se lirriltaba a pasarle la mano por la cabeza a Reznicek en actitud amistosa. Pero cuando ambos discreparon sobre la autocensural Reznicek se puso m¨¢s pesado de lo habitual y Hrabal le acus¨® de "tener una actitud cornunista". Reznicek, exaltado, reaccion¨® a gritos y busc¨® la complicidad del p¨²blico. "?Me ha llamado comunista!", gritaba.

En otro debate, el escritor P¨¦ter Esterh¨¢zy manifest¨® su estupor porque los titulares de la Prensa francesa, al referirse a las elecciones en Hungr¨ªa, hablaban del triunfo de la derecha. "Para m¨ª, es el triunfo de la revoluci¨®n", dijo, "porque hemos llegado a un punto en que no est¨¢ nada claro qu¨¦ es la derecha y qu¨¦ es la izquierda. Pero yo tengo muy claro que si los que estaban antes eran la izquierda, todos en Hungr¨ªa queremos ser de derechas".

La intervenci¨®n m¨¢s lapidaria la realiz¨® el sovi¨¦tico Bulat Okudjava, cantautor de ¨¦xito en la URSS en los a?os sesenta y reciclado a novelista. "?Qu¨¦ queda hoy de tantos a?os de socialismo en la Uni¨®n Sovi¨¦tica?", le pregunt¨® alguien del p¨²blico. La respuesta de Okudjava fue contundente. "Muertos. S¨®lo queda mucha gente muerta".