Pogorelich: "El ¨¦xito ha sido negativo para m¨ª"

"El rock y el pop no me interesan porque tienen demasiado que ver con la pornograf¨ªa y con el puro negocio". "Karajan era una ruina art¨ªstica". "Quiero reencontrar y redescubrir la belleza original de los compositores espa?oles". As¨ª de rotundas son algunas de las declaraciones que realiza en esta entrevista el pianista yugoslavo afincado en Londres Ivo Pogorelich, uno de los artistas m¨¢s pol¨¦micos de la actualidad. Petulante, sincero, inteligente e ¨ªntimamente persuadido de que es un "mes¨ªas", Pogorelich, de 31 a?os de edad, ofreci¨® el mi¨¦reoles un concierto en C¨®rdoba. Esta tarde act¨²a en Valencia, y los pr¨®ximos d¨ªas lo har¨¢ en Palma de Mallorca o Barcelona.

Pregunta. Existe la opini¨®n generalizada de que su ¨¦xito internacional se debe a los estudios de mercadotecnia.Respuesta. Yo le tengo que ser muy sincero: el marketing es parte imprescindible de una carrera mundial. No puedes ser famoso en tu cocina.

P. ?Ha renunciado a algo en pro de su carrera internacional?

R. El mayor sacrificio es que despu¨¦s de cada uno de los aplausos empieza un nuevo per¨ªodo de trabajo duro. No hay descanso, no puedes estar satisfecho con lo que hiciste ayer. Como artista, s¨®lo eres bueno en la medida que lo es tu ¨²ltima interpretaci¨®n. Es lo mismo que ocurre con ustedes, los periodistas, que valen lo que vale su ¨²ltimo art¨ªculo. Pero ustedes s¨®lo tienen que observar, mientras que el artista tiene que invertir e intervenir, y eso es muy muy delicado. Llega un momento en que te hartas de ti mismo. Siempre pienso que me las tengo que apa?ar con la naturaleza humana, y a veces lo que la naturaleza humana necesita es una aspirina.

P. ?Qu¨¦ es para usted el ¨¦xito?

R. No entierido su pregunta. ?Qu¨¦ es el ¨¦xito? No entiendo esa palabra.

P. Usted la ha utilizado muchas veces.

R. El ¨¦xito para m¨ª s¨®lo ha tra¨ªdo cosas negativas: ha limitado mi amistad con gente, me ha mostrado mucho del aspecto oscuro de la naturaleza humana. Por eso, trato de aislarme. Quiero limitarme al mundo de mi familia y de mi trabajo.

P. ?Qu¨¦ admira?

R. Admiro a los genios. Pero me doy cuenta de que detr¨¢s del genio est¨¢ la inspiraci¨®n, el trabajo duro y el sacrificio. A veces se usa esta palabra con demasiada frecuencia. Creo que, afortunadamente, en m¨²sica existen m¨¢s genios que en otras manifestataciones del arte. Yo tengo el enorme privilegio de que, por mi trabajo, puedo llegar m¨¢s cerca que la gente normal a un mundo fascinante, al que no pueden acceder otras mentes humanas.

P. ?Tiene vocaci¨®n de mes¨ªas?

R. No lo s¨¦, es posible. Pero para llegar a eso es preciso recorrer un camino muy largo.

Matrimonio

P. Usted contrajo matrimonio en 1980, cuando contaba tan s¨®lo 22 a?os, con Aliza Kerezade, una mujer mucho mayor que usted de la que recibi¨® clases en Mosc¨² durante cinco a?os. ?Qu¨¦ es para usted el matrimonio?R. Toda historia de amor es ¨²nica. En mi caso no se trata de un tema sexual, es algo mucho m¨¢s hondo, es una propuesta para una relaci¨®n ¨²nica, entre dos personas que tambi¨¦n son ¨²nicas. Podr¨ªamos hablar mucho sobre esto, pero la esencia es ¨¦sa.

P. ?Puede se?alar a tres pianistas?

R. Rachmaninov y Brahms. Contempor¨¢neos, sin duda mi mujer; nadie utiliza instrumentalmente el piano como ella. Pero, aunque yo la animo, se niega a ofrecer conciertos. Otro gran pianista fue Byron Janis.

P. ?Contin¨²a recibiendo consejos musicales de su esposa?

R. Por supuesto, absolutamente. Ella es mi mayor cr¨ªtico y ella hace que me sienta pr¨ªncipe del piano.

P. ?Por qu¨¦ ha finalizado su recital con una obra tan brillante y superficial como Islamey?

R. No, no es tan superficial. Si se considera a Balakirev superficial habr¨ªa que considerar a toda la literatura plan¨ªstica espa?ola de la misma forma, incluyendo a Granados, Alb¨¦niz, a todos. Islamey es una obra, como el planismo espa?ol, basada en el folclore.

P. ?Ha interpretado m¨²sica espa?ola?

R. De la misma forma que me he acercado a Balakirev, quiero restaurar otras obras que se han trivializado con tantas interpretaciones err¨®neas, como la suite Iberia, de Alb¨¦niz. Quiero reencontrar y redescubrir la belleza original de los compositores espa?oles. Creo que por el hecho de ser extranjero tengo la oportunidad de obtener ¨¦xito en esta empresa.

P. ?No considera que la suite Iberia ha sido ya descubierta? ?Conoce las versiones de Alicia de Larrocha?

R. No lo s¨¦, no lo s¨¦. Una buena obra musical ofrece oportunidades sin l¨ªmite. La real grandeza de la m¨²sica se expresa por gente que procede de otras latitudes culturales, cuando las culturas se funden. Posiblemente su lectura, la de Alicia de Larrocha, es la mejor lectura posible nacional, pero le falta esa distancia a la que hago referencia.

P. ?Cu¨¢l fue la verdadera raz¨®n de que le descalificaran en el famoso Premio Chopin de Varsovia en 1980? La pol¨¦mica, que le catapult¨® a la fama, ?fue creada por t¨¦cnicos de imagen?

R. Sinceramente, el marketing empez¨® porque mi interpretaci¨®n era tal que hac¨ªa desmayarse a los conservadores, mientras que los progresistas saltaban de j¨²bilo, pero la realidad fue otra. Los protagonistas fueron los ministros de Cultura de Polonia y de la URSS, que ten¨ªan a sus propios candidatos para el certamen. No fue s¨®lo que Martha Arguerich abandonara disconforme el jurado al no someterse a la presi¨®n de los ministros de Cultura.

P. ?Sab¨ªa que en pa¨ªses como Espa?a e Italia se le llama ir¨®nicamente Divo Pogorelich?

R. S¨ª, pero esto forma parte del folclore moderno.

P. ?Le interesa el rock?

R. Yo creo que hubo algunos temas, por ejemplo de los Beatles, muy inspirados. Pero ahora esto no me interesan porque tiene demasiado que ver con la pornografia y el puro negocio.