La memoria de Defensor del Pueblo revela malos tratos policiales
El defensor del pueblo, ?lvaro Gil-Robles, en su memoria sobre 1989, entregada ayer al Parlamento, muestra su preocupaci¨®n por la existencia de casos de malos tratos a ciudadanos por agentes de las fuerzas de seguridad. El informe critica el obstruccionismo de los denunciados, la falta de voluntad de las autoridades responsables para esclarecer los hechos y adoptar sobre los funcionarios las medidas elementales precautorias, y la benevolencia de los jueces, que suelen calificar los hechos como faltas, en atenci¨®n s¨®lo al tiempo de curaci¨®n de las lesiones, sin investigar si existi¨® delito.
En materia de malos tratos policiales, la Memoria del Defensor del Pueblo de 1989 advierte lo siguiente: "Hemos podido comprobar no sin cierta preocupaci¨®n, que cuando se profundiza en la investigaci¨®n de aquellos casos que re¨²nen todos los indicios racionales de que el ciudadano tiene raz¨®n en su denuncia, es casi seguro que los agentes implicados han adoptado a su vez todo tipo de actitudes previas que procuran dificultar el esclarecimiento de los hechos, como denunciar a su vez por agresi¨®n o atentado a la persona detenida, proveerse de certificados m¨¦dicos con lesiones de m¨ªnima trascendencia (en muchos casos fruto de la propia agresi¨®n al ciudadano) o atribuir las lesiones de aqu¨¦l a autolesiones o accidentes fortuitos".Seg¨²n el Defensor del Pueblo, una vez que se comunican los hechos a las autoridades responsables, "la adopci¨®n de una resoluci¨®n expresa, exculpatoria o sancionadora, suele prolongarse durante meses, durante los cuales no se suele adoptar resoluci¨®n alguna de suspensi¨®n provisional de esos agentes en sus funciones, que contin¨²an su normal actividad, dando la impresi¨®n a los ciudadanos denunciantes y v¨ªctimas de esas pr¨¢cticas de que no ha ocurrido absolutamente nada". El Defensor del Pueblo insta a los poderes p¨²blicos a que no supediten la investigaci¨®n interna y la adopci¨®n de posibles medidas supensorias y precautorias al resultado de la justicia, cuyo fallo suele demorarse a?os.
El informe recoge varias denuncias por malos tratos de miembros de la Guardia Civil. Seg¨²n una de ellas, varias personas fueron detenidos por guardias civiles y al puesto del instituto en Loeches (Madrid) el pasado agosto tras un incidente en una discoteca. "Denunciaron haber recibido golpes en distintas partes del cuerpo, permanecer varias horas incomunicados e incluso un guardia civil despoj¨® a uno de ellos de sus gafas rompi¨¦ndoselas contra el suelo".
El Defensor solicit¨® un informe al director general de la Guardia Civil, Luis Rold¨¢n, "sorprendentemente", le contest¨® el coronel jefe de la secci¨®n de recursos y r¨¦gimen disciplinarios. ?ste comunic¨® que los denunciantes fueron invitados a comparecer "voluntariamente", aunque esposados, en las dependencias del puesto de la localidad y justific¨® las lesiones en una ri?a anterior.
El informe cita otros cuatro casos de presuntos malos tratos por guardias civiles.
Sobre el Cuerpo Nacional de Polic¨ªa versan varias denuncias.Funcionarios del Grupo Primero Operativo de Extranjeros han sido acusados por dos senegaleses de maltratarlos cuando permanec¨ªan esposados en la comisar¨ªa de Barajas. El juzgado de instrucci¨®n n¨²mero 26 de Madrid declar¨® falta los hechos. "Hay que resaltar que los funcionarios denunciados se personaron en el citado juzgado y lograron autorizaci¨®n para expulsar a los denunciantes", lo que supon¨ªa un "alejamiento de los ¨²nicos testigos".
El Defensor del Pueblo muestra su inquietud por el hecho de que los jueces "con harta frecuencia califican como faltas las
La memoria del Defensor del Pueblo revela malos tratos policiales
denuncias sobre malos tratos inferidos por agentes policiales, atendiendo simplemente al tiempo de curaci¨®n de las lesiones, sin investigar exhaustivamente, la concurrencia de otros datos que pudieran determinar su calificaci¨®n como delito". Las denuncias de malos tratos policiales a extranjeros menudean en el informe.Desnudar al detenido
El Defensor se queja de que aunque se acredit¨® malos tratos a un ciudadano por, polic¨ªas municipales de Madrid, los expedientes sancionadores se hallan paralizados, al igual que otros tres referidos a agentes de ese cuerpo, y otros dos se cerraron por falta de pruebas. Sobre los malos tratos inferidos a una persona en septiembre de 1986 por agentes municipales de Madrid se manifiesta que "se instruy¨® expediente disciplinario al agente actuante y posteriormente: al propio instructor del expediente por demoras en su tramitaci¨®n y notoria obstrucci¨®n al esclarecimiento de la misma". "A pesar de los continuos requerimientos realizados al Ayuntamiento de Madrid, a trav¨¦s de su alcalde, a¨²n no se tiene conocimiento de que haya terminado el procedimiento".
En una denuncia por malos tratos contra agentes municipales de Elche (Alicante) no se prob¨® el origen de las lesiones, pero s¨ª "se comprob5 que en este caso, como es pr¨¢ctica frecuente, se desnud¨® completamente a los detenidos en la comisar¨ªa de Polic¨ªa a que fueron conducidos, pr¨¢ctica poco acorde con la dignidad de la persona".
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