Un ex funcionario del Gobierno Civil de Barcelona, acusado de falsedad y cohecho

BLANCA CIA Un ex funcionario del Gobierno Civil de Barcelona, Emiliano Veiga Rodr¨ªguez, fue juzgado ayer en la Audiencia de Barcelona por las acusaciones de cohecho y falsedad en documento oficial, delitos supuestamente cometidos al facilitar permisos; de explotaci¨®n para la instalaci¨®n de m¨¢quinas tragaperras. Las supuestas irregularidades se llevaron a cabo en 1982, a?o en que un real decreto prohibi¨® la instalaci¨®n de ese tipo de m¨¢quinas en bares. Junto con Veiga fueron juzgados otros 15 procesados, tambi¨¦n acusados de las mismas irregularidades. Del conjunto de los procesados, Veiga es el que se enfrenta con la petici¨®n fiscal m¨¢s alta, concretamente 12 a?os de prisi¨®n y ocho de inhabilitaci¨®n especial.

Veiga, que actualmente tiene 70 a?os, estaba destinado en el negociado de orden p¨²blico del Gobierno Civil. ?ste servicio estaba ubicado en las mismas dependencias que el negociado de juego. Seg¨²n la acusaci¨®n, Veiga, aprovechando su libre acceso a los impresos de autorizaci¨®n para la instalaci¨®n de las m¨¢quinas tragaperras, se puso de acuerdo con un amigo suyo, Sebasti¨¢n Fontrodona, para facilitar los permisos de explotaci¨®n a los industriales interesados en instalar las m¨¢quinas.

De acuerdo con la acusaci¨®n, el funcionario utilizaba los impresos oficiales del Gobierno Civil a los que estampaba un sello, tambi¨¦n oficial, dejando en blanco los datos referidos a la maquina de que se tratase. Estos datos eran completados por los industriales interesados en tener el permiso. El fiscal sostiene que, por medio de este procedimiento, Veiga concedi¨® 100 permisos ilegales y que por cada uno de ellos cobr¨® un promedio de 20.000 a 40.000 pesetas. Para estas maniobras, Veiga utiliz¨® a varias personas como intermediarias con los industriales interesados en el arreglo.El ex funcionario neg¨® ante el tribunal haber realizado ninguna operaci¨®n de este tipo e insisti¨® en que nunca utiliz¨® los impresos de autorizaci¨®n. Sin embargo, a preguntas del fiscal, Veiga reconoci¨® que en su domicilio ten¨ªa impresos y un tamp¨®n del Gobierno Civil aunque matiz¨®, que se trataba de formularlos en desuso. "Los llevaba para los apuntes de mis hijas", manifest¨®. La polic¨ªa hall¨® en el domicilio del funcionario un total de 30 impresos de autorizaci¨®n para la instalaci¨®n de las m¨¢quinas y comprob¨® en el Gobierno Civil, que los impresos y el tamp¨®n, encontrados en el domicilio de Veiga eran los utilizados habitualmente en esas dependencias para la autorizaci¨®n de las m¨¢quinas.