La Corporaci¨®n Industrial de Banesto alcanza un valor de 320.000 millones de pesetas a precios de mercado

La Corporaci¨®n Industrial y Financiera de Banesto quedar¨¢ constituida como una sociedad an¨®nima con participaciones industriales valoradas en 320.000 millones a precios de mercado y una facturaci¨®n consolidada en las empresas controladas por el banco de medio bill¨®n de pesetas. La nueva corporaci¨®n, formada a partir de las participaciones escindidas de Banesto y de sus filiales Bandesco y Banco de Vitoria, se convierte as¨ª en uno de los primeros grupos industriales del pa¨ªs, con presencia en 200 empresas, lo que representa el 1% del producto interior bruto espa?ol.

La Corporaci¨®n de Banesto est¨¢ justificada en la necesidad de unificar decisiones y en la conveniencia de clarificar la propiedad y el valor del grupo industrial. La reestructuraci¨®n se fundamenta, por otra parte, en la normativa del Banco de Espa?a sobre consolidaci¨®n de estados financieros, por lo que incluye exclusivamente los valores industriales de los bancos y, de las sociedades de inversi¨®n mobiliaria y no, por el momento, las que corresponden a compa?¨ªas de seguros y otras filiales y participadas industriales.Entre las principales compa?¨ªas que van a conformar la futura Corporaci¨®n Industrial y Financiera de Banesto destacan nueve sociedades, que absorben el 67,14% del valor del grupo grupo y en las que el banco presidido por Mario Conde dispone de una participaci¨®n suficiente como para garantizar el control de la gesti¨®n.

Nueve 'perlas'

Estas compa?¨ªas, que suman 150.000 empleos directos, son por orden de importancia la Uni¨®n y el F¨¦nix (seguros), Asturiana del Zinc (miner¨ªa), Acerinox (siderurgia), Petromed (petroqu¨ªmica), Agrom¨¢n (construcci¨®n), Auxiliar de la Construcci¨®n Sanson (cementos), Carburos Met¨¢licos (qu¨ªmicas) Tudor (bater¨ªas) y Sniace (papel).

Las nueve perlas de la Corporaci¨®n representan un 1,5% de la formaci¨®n bruta de capital fijo y sus recursos generados han aumentado en t¨¦rminos reales un 12,23% a lo largo del per¨ªodo comprendido entre 1980 y 1988.

No obstante, todas estas cifras hubieran sido bastante mejores de no producirse la baja de Valenciana de Cementos, considerada hace unos meses en medios cercanos al banco como la verdadera joya de la corona de la Corporaci¨®n. El contencioso entre Mario Conde y la familia Serratosa, actuales gestores de Valenciana, se sald¨® finalmente con el reparto del grupo cementero de Banesto.

El acuerdo de distribuci¨®n supuso el traspaso de la matriz al grupo constituido por la familia Serratosa y la multinacional noruega Aker Norcem, en tanto que Banesto pas¨® a asegurar el control de Sanson, adem¨¢s de conseguir participaciones mayoritarias en Portland Iberia, Cementos Morata y Cementos de las Islas. Como contrapartida, la venta de las acciones que Banesto pose¨ªa en Valenciana han reportado a la entidad presidida por Conde unos ingresos de 60.000 millones de pesetas.

La formaci¨®n del nuevo grupo exige como paso previo la materializaci¨®n del proceso de fusi¨®n de las sociedades de cartera de Banestos, las denominadas isas, cuyas participaciones industriales pasar¨¢n a la Corporaci¨®n de Banesto. De acuerdo con los objetivos enunciados por la entidad, la fusi¨®n de las isas se instrumentar¨¢ mediante la absorci¨®n por Cartisa de las otras cuatros sociedades de cartera, Fintisa, Patrisa, Rentisa e Invatisa. Para ello, Cartisa ampliar¨¢ su capital en 23,6 millones de acciones.

La operaci¨®n se completa con la segregaci¨®n de las carteras de renta variable de Banesto, Bandesco y Banco de Vitoria. Estas participaciones fusionadas con las procedentes de las isas formar¨¢n el conjunto de la nueva Cartisa que cambiar¨¢ su nombre por el de Corporaci¨®n Industrial y Financiera de Banesto. El banco tendr¨¢ una participaci¨®n del 76,42% del capital del nuevo grupo, que dispondr¨¢ de un margen superior al 25% para dar entrada de otros potenciales socios, conservando en todo caso el control efectivo de la Corporaci¨®n Industrial, con el 51%.