Los m¨¦dicos descartan que Elizabeth Taylor tenga el sida

Elizabeth Taylor, la inmortal Cleopatra y una de las m¨¢s brillantes actrices de Hollywood, se encuentra desde el pasado lunes en la unidad de cuidados intensivos del hospital St. John, en Santa M¨®nica. Los m¨¦dicos calificaron anoche el estado de la actriz como "grave" y confirmaron que la paciente se encontraba "seriamente enferma" aunque descartaron que tuviera sida. Los m¨¦dicos anunciaron poco despu¨¦s una ligera mejor¨ªa en la evoluci¨®n de la enfermedad.

El pasado domingo, Elizabeth Taylor fue sometida a una biopsia de pulm¨®n, cuyo resultado que pretende determinar la causa de su neumon¨ªa, se conocer¨¢ ma?ana jueves.Elizabeth Taylor fue dada de alta en el hospital St. John hace dos semanas, poco despu¨¦s de abandonar el hospital Daniel Freeman Marina del Rey, de Los ?ngeles, donde fue ingresada el pasado d¨ªa 9 a consecuencia de un ataque de sinusitis y fiebre.

De forma casi inmediata, los m¨¦dicos del St. John descarta ron que la actriz sufriera el sindrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA), saliendo al paso de los m¨²ltiples rumores que apuntaban a esa posibilidad. Los m¨¦dicos reconocieron, sin embargo, que en esta ocasi¨®n la paciente ten¨ªa "serios problemas de salud".

Desde el pasado lunes, Elizabeth Taylor se encuentra en la unidad de cuidados intensivos y una mascarilla la ayuda a mantener la respiraci¨®n. Su estado, a pesar de la gravedad, es estable, y los m¨¦dicos conf¨ªan en que la paciente mejore. Sus cuatro hijos se hallan junto a ella, y el hospital se encuentra rodeado de periodistas y reporteros.

La representante de la actriz, la publicista Chen Sam, declar¨® ayer que "Elizabeth no se encuentra bien, su fiebre sigue sin bajar, pero les puedo asegurar que [la actriz] no est¨¢ en el lecho de muerte". Seg¨²n una ayudante de Chen Sam Lisa del Favero, los m¨¦dicos descartan de momento que la actriz sufra alg¨²n tipo de c¨¢ncer.

Una mujer con problemas

Taylor, que naci¨® en Londres hace 58 a?os de edad, est¨¢ con siderada como una de las m¨¢s brillantes y extravagantes estrellas de Hollywood. Su imagen de pureza y el incre¨ªble violeta de sus ojos se oscurecieron con el tiempo para dar paso a una mujer con problemas de peso, alcohol, drogas y toda clase de l¨ªos conyugales.La cr¨ªtica la ha reconocido como una de las grandes actrices de la historia. Sus interpretaciones en La gata sobre el tejado de zinc (1958) y Cleopatra (1962) configuran por s¨ª solas cap¨ªtulos brillant¨ªsimos de la cinematograf¨ªa, aunque fueron sus interpretaciones de una prostituta en Butterfield 8 (1960) y de una borracha en ?Qui¨¦n teme a Virginia WoIP (1966), las que le valieron el Oscar.

Taylor ha recordado en numerosas ocasiones que jam¨¢s quiso ser actriz a pesar de su inmediato ¨¦xito, y que su presencia en las pantallas se justific¨® por el inter¨¦s de su madre a que aceptara las propuestas de Hollywood.

La actriz consigui¨® superar el paso de ni?a-actriz -Lassie come home (1942) y National velvet (1944)- a actriz-adulta sin aparentes problemas, a pesar de reconocer que durante mucho tiempo los productores y el p¨²blico le negaron "el derecho a crecer". Fue un periodo en el que Taylor tuvo que reaccionar como una ni?a a pesar de ser una mujer. La actriz ha estado casada en siete ocasiones, pero el verdadero amor de su vida fue el actor brit¨¢nico Richard Burton, que falleci¨® en 1984 a la edad de 59 a?os.

La salud de la actriz siempre ha estado en el primer plano de la actualidad. Taylor ha pasado por la sala de operaciones en 30 ocasiones, aunque en su historial m¨¦dico destaca una neumon¨ªa grav¨ªsima en 1961 y una traqueotom¨ªa a la que fue sometida cuando hac¨ªa campa?a con su marido n¨²mero seis, el senador Jack Warner. En los ¨²ltimos a?os, Elizabeth Taylor se ha dedicado a patrocinar toda clase de acciones filantr¨®picas a escala internacional para luchar contra el sida.

Su lucha personal contra el sida se increment¨® en 1985, poco despu¨¦s de la muerte de su gran amigo y coprotagonista de Gigante (1956) el actor Rock Hudson, que falleci¨® a consecuencia del s¨ªndrome. Sus campa?as a favor de la investigaci¨®n del sida han servido para recaudar centenares de millones de d¨®lares, que se han dedicado a la lucha contra esta plaga que tambi¨¦n ha causado estragos en Hollywood.

Su dedicaci¨®n a esta causa sirvi¨® para incrementar los rumores de que ella sufr¨ªa el s¨ªndrome, aunque el pasado fin de semana sus m¨¦dicos fueron categ¨®ricos a la hora de negarlo. En 1987, mientras unos almacenes presentaban un perfume con su nombre, el Gobierno franc¨¦s premiaba sus actividades ben¨¦ficas con la Orden de la Legi¨®n de Honor. Uno de sus ¨²ltimos actos p¨²blicos fue la asistencia al entierro del magnate de la Malcolin Forbes, de quien se dijo que fue su ¨²ltimo amante.