'Morente-Sabicas', una grabaci¨®n hist¨®rica
Se presenta en Madrid el disco p¨®stumo del guitarrista flamenco
Morente-Sabicas, el disco p¨®stumo de Agust¨ªn Castell¨®n, Sabicas, fue presentado anoche en Madrid, 10 d¨ªas despu¨¦s de producirse la muerte del genial guitarrista flamenco. Es una grabaci¨®n hist¨®rica porque, como dice Enrique Morente, "es la ¨²ltima de Sabicas y la ¨²nica que deja con sonido actual acompa?ando cantejondo cl¨¢sico".
"Yo estaba obsesionado con la idea de hacer esta grabaci¨®n", declara Morente. "Conoc¨ª al maestro hace 20 a?os, y me acompa?¨® el cante en muchas fiestas, pero no hab¨ªa una grabaci¨®n de ¨¦l con sonido actual acompa?ando cantejondo, cl¨¢sico. Y yo cre¨ªa que ese toque deb¨ªa quedar para la historia, pues ser¨ªa una lecci¨®n para los guitarristas que vengan despu¨¦s".Hace siete a?os, Morente hab¨ªa propuesto ya a Sabicas cumplir el empe?o, y el guitarrista acept¨® encantado. Pero eran los tiempos en que las compa?¨ªas discogr¨¢ficas ten¨ªan completamente olvidado el flamenco y Morente, dispuesto a financiar ¨¦l mismo esa grabaci¨®n, no ten¨ªa entonces los recursos para abordarla. As¨ª fue pasando el tiempo hasta julio de 1989, cuando los dos se encontraron de nuevo en Bagur (Gerona), donde el cantaor daba un curso para el Taller de M¨²sica de Barcelona y el Centro Carmen Amaya, al que fue invitado Sabicas.
Oferta
Morente le record¨® su oferta de a?os atr¨¢s, y el maestro acept¨® de nuevo encantado. "?C¨®mo no voy a querer, hijo", le dijo, "si se trata de grabar cante bueno, cante grande?". Sabicas siempre fue un gran aficionado al cante y disfrutaba acompa?ando a cantaores amigos en reuniones privadas. En 1983, algunas noches en el caf¨¦ de Silverio de Malasa?a, a Sabicas le daban las claras del d¨ªa acompa?ando el cante de quienes estuvieran con ¨¦l, incansable, para deleite suyo y de quienes se hallaban alrededor.Desde Bagur, Morente y Sabicas viajaron juntos a Madrid, en pleno mes de agosto, para meterse en el estudio de grabaci¨®n. No hubo ensayos ni preparaci¨®n. Sabicas le preguntaba a Enrique qu¨¦ iba a cantar y d¨®nde pon¨ªa la cejilla, y muchas grabaciones fueron v¨¢lidas a la primera toma. En otras que hubo que repetir sirvieron las dos tomas, porque el maestro guitarrista nunca le hac¨ªa al cantaor las mismas variaciones. La grabaci¨®n completa se hizo en tres sesiones de dostres horas cada una. Y a¨²n hab¨ªa tiempo para los toques y los cantes confidencialmente, como una taranta que le cant¨® al maestro la hija de Morente, Estrella, y la r¨¦plica que le dio cant¨¢ndola tambi¨¦n el propio Sabicas.
"Esa forma de tocar para el cante, de hace 60 a?os, se pierde con Sabicas", afirma Morente. "Esa frescura, ese sabor, ese color de toque. Hay muchos guitarristas que tocan maravillosamente bien, pero har¨ªan otro disco distinto. Lo de Sabicas no se va a hacer m¨¢s".
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