Juntos, pero no revueltos

El lehendakari, Jos¨¦ Antonio Ardanza, reuni¨® ayer en Ajuria Enea a los miembros del primer Gobierno aut¨®nomo, formado por Carlos Garaikoetxea, tras el franquismo para celebrar en su compa?¨ªa el d¨¦cimo aniversario de su constituci¨®n. El lehendakari y su antecesor calificaron de intenso el periodo transcurrido.

En uno de los corros Ardanza charl¨® con Garaikoetxea y Mario. Fern¨¢ndez, independiente pero en las listas de EA, mientras que Luis Mar¨ªa Retolaza, ex consejero de Interior que ser¨¢ juzgado por las escuchas ilegales a Garaikoetxea, no lleg¨® a cruzar ni media palabra con el que fuera su presidente en el primero y parte del segundo Gobierno.Todos ellos recibieron de manos de Jos¨¦ Antonio Ardanza una medalla conmemorativa del aniversario, en presencia de los miembros del actual Gabinete de coalici¨®n PNV-PSOE. Una celebraci¨®n en la que, juntos pero no revueltos, se encontraron frente a frente muchos de los protagonistas de una sentida y visceral escisi¨®n, la del PNV, que acab¨® con la hegemon¨ªa de ese partido en la pol¨ªtica vasca. Los mismos ojos que poco despu¨¦s ve¨ªan c¨®mo los socialisitas ocupaban plantas enteras de la sede del Gobierno en Lakua.

En medio de un ambiente de cordialidad, Garaikoetxea y Retolaza fueron probablemente las dos ¨²nicas personas que no se dieron la mano. Retolaza se volvi¨® de espaldas en el preciso instante en que Garaikoetxea entraba en escena y sus antiguos compa?eros y colegas daban la mano al que fuera su patr¨®n.

Ardanza dijo en un breve discurso de introducci¨®n al acto que la asignatura pendiente sigue siendo la erradicaci¨®n de la violencia de un sector minoritario de la sociedad, aunque matiz¨® que en estos diez a?os "se han puesto los fundamentos para ir superando esa situaci¨®n".

Minutos despu¨¦s, mientras los congregados depart¨ªan con champa?a y alg¨²n que otro zumo de tomate, Garaikoetxea se mostraba m¨¢s desencantado y explicaba que los gobiernos presididos por ¨¦l "no se resignaron a la marcha atr¨¢s que se estaba produciendo en la pol¨ªtica auton¨®mica, lo denunciamos y nos cost¨® muy caro". El ex lehendakari declar¨® sentir nostalgia "bien entendida" y recomend¨® un giro de tim¨®n para retomar la ilusi¨®n de los primeros gobiernos y que "han sido sustituidas m¨¢s bien por el acomodo".