Dirk Bogarde vuelve al cine despu¨¦s de 13 a?os de ausencia

ENVIADO ESPECIAL El brit¨¢nico Dirk Bogarde, uno de los m¨¢s grandes actores de todos los tiempos, protagonista de obras del calibre de El sirviente, de Joseph Losey; El crep¨²sculo de los dioses y Muerte en Venecia, ambas de Luchino Visconti; ha vuelto a Cannes -despu¨¦s de 13 a?os de retiro voluntario del cine- para presentar el ¨²ltimo y notabil¨ªsimo filme del franc¨¦s Bertrand Tavernier, Daddy nostalgie.

Bogarde lleva a cabo en esta pel¨ªcula una creaci¨®n de alta y refinad¨ªsima calidad, muy acorde con su estilo inimitable, desgarrado y no obstante sereno, mesurado y sutil.

El gran actor, notablemente envejecido, lleg¨® y convenci¨®. Sigue, pese al desentrenamiento, en la plenitud y desde ayer, Dirk Bogarde es un candidato con muchas posibilidades al premio a la mejor interpretaci¨®n masculina.

Junto a Bogarde, su compatriota, afincada desde hace muchos a?os en el cine franc¨¦s, Jane Birkin lleva a cabo en Daddy nostalgie la mejor interpretaci¨®n de su ya larga filmografia. Y el enfrentamiento amoroso entre ambos -en la ficci¨®n del filme son padre e hija- resulta perturbador y, por debajo de su sencillez, explosivo. Bertrand Tavernier extrae de esta historia tierna, contenida y llena de cautela, dado su complejo y espinoso fondo, algunas secuencias verdaderamente emotivas y llenas de belleza.

Estamos -junto con el desbordante filme ruso Taxi blues, primer largometraje de Pavel Longuin; El interrogatorio, del polaco Bugajski, y Cazador blanco, coraz¨®n negro, de Clint Eastwood- ante una de las cuatro pel¨ªculas importantes que se han presentado hasta ahora en el concurso de Cannes 90. La Palma de Oro puede ser, si no aparece a lo largo de esta semana una obra arrolladora -hay quien dice que as¨ª es el Cyrano de Bergerac de G¨¦rard Depardieu, pero antes habr¨¢ que verla-, para cualquiera de ellas.

Una parte de la Prensa francesa apuesta abiertamente por Bogarde, Birkin y Tavernier; y otra, por Taxi blues, sorprendente filme ruso del novato Longuin, que cuenta con libertad sin l¨ªmites una historia que los que no tienen idioma califican aqu¨ª como la m¨¢s heavy que se ha visto en el cine reciente: una visi¨®n dura, vigorosa, divertid¨ªsima, libertarla por los cuatro costados, tallada en ritmo de un poderoso blues en saxo tenor, del pudridero humano de los bajos fondos del Mosc¨² actual. Hay que ver para creer el desparpajo y la absoluta indisciplina est¨¦tica de este Longuin, que convierte a todo el rocker¨ªo duro occidental en un reba?o de corderos.

No hay ning¨²n largometraje espa?ol en la secci¨®n oficial de Cannes-90. S¨ª hay en cambio un cortometraje, Polvo enamorado de Javier L¨®pez Izquierdo. Puente de Varsovia, de Pere Portabella, se present¨® anoche fuera del alcance de esta cr¨®nica, en el revoltijo de la Quincena de los Realizadores, mientras que el filme de Jos¨¦ Luis Guer¨ªn Innisfree tiene el pr¨®ximo viernes un lugar en la prestigiosa secci¨®n paralela Una Cierta Mirada.