Los padres del colegio de Montse aceptan su derecho a ser escolarizada
La asociaci¨®n de padres del colegio Pintor Denis Belgrano, de M¨¢laga, donde acude Montserrat Sierra, la ni?a de cuatro a?os afectada por el sida, no va a cuestionar el derecho a la asistencia a clase de la peque?a, seg¨²n inform¨® ayer el ahogado de la citada asociaci¨®n, Rafael Ram¨ªrez Garc¨ªa. La Audiencia Provincial revoc¨® el dictamen del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 11 de M¨¢laga en el que de forma cautelar acordaba su escolarizaci¨®n.
Seg¨²n Ram¨ªrez, los padres ¨²nicamente pretenden que se adopten medidas de seguridad suficientes para garantizar la salud de sus hijos y preservarlos de un posible contagio. Entre otras cuestiones, solicitan que se aclare cu¨¢l es el grado de enfermedad de Montse, pues seg¨²n entienden, ha existido poca informaci¨®n al respecto. En este sentido, la asociaci¨®n de padres considera que la Audiencia les ha concedido la raz¨®n.Los padres de los ni?os del aula de preescolar del colegio, que en su mayor¨ªa contin¨²an sin llevar sus hijos a clase desde el pasado 22 de marzo, celebrar¨¢n en los pr¨®ximos d¨ªas una reuni¨®n para decidir qu¨¦ actitud adoptan y concretar una petici¨®n de medidas de seguridad, ya que no consideran suficiente la presencia de un profesor de apoyo. Ram¨ªrez apunt¨® la posibilidad de que una de las soluciones satisfactorias podr¨ªa ser que Montse contara con un profesor exclusivamente para ella.
Normalidad
Montse acudi¨® ayer a clase sin que se produjeran incidentes, informa Antonio M¨¦ndez. La llegada de la ni?a estuvo envuelta en una inusitada expectaci¨®n period¨ªstica tras el fallo de la Audiencia Provincial de M¨¢laga que dej¨® sin efecto el auto de escolarizaci¨®n como medida cautelar dictado por la juez de instrucci¨®n n¨²mero 11, Soledad Jurado.
Carmen Mart¨ªnez insisti¨® ayer de nuevo en que su sobrina "seguir¨¢ en el colegio hasta el final".
La llegada de la peque?a, acompa?ada de su t¨ªa y tutora Carmen Mart¨ªnez y primos, estuvo envuelta en una gran expectaci¨®n period¨ªstica.
Montse entr¨® en el aula sin que su presencia fuese recriminada por el resto de las madres, algunas de las cuales comentaban en privado a los informadores que la normalidad de la jornada denotaba que su actitud en el conflicto "no era tan mala como se ha querido resaltar".
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