Incertidumbre sobre el proceso de unificaci¨®n de Yemen
El calor h¨²medo del tr¨®pico invade por estas fechas la capital de la hasta ahora Rep¨²blica Popular Democr¨¢tica de Yemen (RPDY). Pero las diferencias entre Ad¨¦n y su hermana del norte, San¨¢, no son s¨®lo clim¨¢ticas. El estilo sovi¨¦tico, con consignas en las rocas, se hace presente antes de llegar a la ciudad. Luego, carteles revolucionarios y estrellas rojas recuerdan un pasado cercano de socialismo cient¨ªfico experimental. "Se han producido cambios, pero la mayor¨ªa ten¨ªan que haberse llevado a cabo aunque no se hubiera puesto en marcha el proceso de unidad", dice una fuente oficial.
La unificaci¨®n fue anunciada ayer "para antes del pr¨®ximo fin de semana" por el ¨®rgano oficial del Partido Socialista Yemen¨ª (PSY), Al Thawri, en el poder en Ad¨¦n, que es tal vez el ¨²nico partido comunista del mundo que ha reconocido en p¨²blico sus "errores pasados", como medida previa hacia una apertura poco traum¨¢tica. S¨®lo tal actitud ha permitido convertir en realidad pol¨ªtica la vieja aspiraci¨®n de unidad con el norte que se ven¨ªa planeando desde 1972. Las transformaciones no han sido peque?as.El llamado Yemen del Sur sac¨® a la luz el pasado junio un amplio programa de reformas pol¨ªticas y econ¨®micas, entre las que destacan como m¨¢s revolucionarias la autorizaci¨®n de inversiones privadas en la construcci¨®n de viviendas y la reestructuraci¨®n de relaciones entre el Gobierno y el partido ¨²nico. En el colmo de la traici¨®n a Marx, las autoridades de Ad¨¦n, deseosas de atraer divisas extranjeras, colocaron bonos del Estado en el mercado saud¨ª. Al final, este experimento ¨²nico de comunismo en el mundo ¨¢rabe que constitu¨ªa la RPDY ha terminado por reanudar relaciones diplom¨¢ticas con Washington, tras una ruptura de 20 a?os. Los argumentos que en el pasado permitieron al Gobierno de San¨¢ justificar el fracaso de la unidad se cayeron por su peso, a finales del a?o pasado, cuando el Politbur¨® del PSY anunci¨® que los suryemen¨ªes ser¨ªan libres para viajar al extranjero. Ya desde mayo de 1988 se ven¨ªa permitiendo a todos los habitantes de la RPDY visitar Yemen del Norte con su carn¨¦ de identidad.
Casi de inmediato, el presidente de este pa¨ªs, Al¨ª Abdala Salej, expres¨® la aprobaci¨®n de San¨¢ a las concesiones del sur con su presencia en las celebraciones del 222 aniversario de la retirada de las tropas brit¨¢nicas de Ad¨¦n, el pasado 30 de noviembre. El r¨¦gimen de San¨¢ tampoco ha sido precisamente un modelo de democracia y pluralismo, y la multiplicidad de partidos constituye uno de los principales elementos de la unidad. "S¨®lo que nosotros hemos dado el paso hacia el pluripartidismo antes de proceder a la uni¨®n, en tanto que ellos han preferido remitirse a lo que, a tal efecto, dispone la Constituci¨®n com¨²n que se ha redactado", manifiesta un alto funcionario suryemen¨ª moderado. Por otra parte, en el sur se ve como un logro que el Gobierno de San¨¢ haya aceptado la negociaci¨®n y el reparto de cargos con el PSY, a los que los rigoristas isl¨¢micos siempre se han opuesto. Pero, Ad¨¦n conf¨ªa en lograr un acuerdo t¨¢cito para distribuir a partes iguales los puestos de la Administraci¨®n.
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