Juegos de guerra

Las bolsas espa?olas no han escapado a la presi¨®n de un acontecimiento imprevisto como es un conflicto b¨¦lico, aunque lo han matizado a su manera y el aluvi¨®n de papel ha contado con importantes tomas de posiciones en aquellas sociedades que, al parecer, pueden sacar provecho de la situaci¨®n. Repsol registr¨® una subida de 65 pesetas al final de la sesi¨®n y super¨® los 1,6 millones de acciones negociadas, mientras que las otras sociedades petroleras se anotaban recortes moderados. Lo positivo de esta sesi¨®n se limita a esa subida, ya que el resto de los sectores del mercado acusaron los nervios de unos inversores que desde hace unos d¨ªas dudaban sobre mantenerse en el mercado o abandonarlo hasta nueva orden. Si la nueva ca¨ªda de Tokio, de m¨¢s de 500 yenes, aceler¨® la salida de papel, Wall Street confirm¨® que se estaba en la direcci¨®n adecuada con una apertura negativa que a las dos horas de sesi¨®n se hab¨ªa convertido en un recorte de m¨¢s de 30 puntos, aunque con un volumen de negocio muy alto.El problema particuar de estas bolsas es que el ¨ªndice madrile?o se ha acercado demasiado al nivel del 290%, un soporte que, a la vista de las circunstancias, no parece que vaya a resultar lo suficientemente s¨®lido como para aguantar el empuje del papel y evitar situaciones m¨¢s dif¨ªciles.