El resurgir del alcalde

Marion Barry podr¨¢ ser a partir de ahora un hombre completamente feliz. Pese a todo lo que ha tenido que pasar hasta llegar a la definitiva resoluci¨®n de su caso, que ha captado la atenci¨®n de Washington y del mundo entero, ha salido airoso del trance. Marion Barry es un hombre que hasta hace poco corr¨ªa el riesgo de ser acusado de criminal y de ser condenado a la c¨¢rcel. ( ... ) Hoy el alcalde Barry es culpable solamente de un delito leve: de posesi¨®n de coca¨ªna. Ha sido absuelto de otras acusaciones. ( ... )El veredicto ha sido fruto del esfuerzo de 12 jueces que han examinado todas las pruebas con Washington, 13 de agosto ecuanimidad y sin presiones pol¨ªticas. El resultado es un producto del sistema judicial norteamericano y debe ser respetado. ( ... ) Esta afirmaci¨®n puede ser aplicada tanto a la defensa como a la acusaci¨®n. Hasta que se ha llegado a este punto, la ciudad ha estado bajo el liderazgo de un hombre implicado en una mentira. Barry admite esto en sus constantes declaraciones sobre el n¨²mero de d¨ªas que ha estado sin consumir droga y sobre su preocupaci¨®n por curar "mi mente, mi cuerpo y mi alma". ( ... )

Si no hubiera sido por esa detenci¨®n, no habr¨ªa adquirido esa conciencia sobre la droga. Y la ciudad -su polic¨ªa, su brigada antidroga y aquellos que combaten la invasi¨®n de las drogas en colegios y barrios- habr¨ªa seguido en manos de un hombre que era ¨¦l mismo un toxic¨®mano encubierto. Es importante que se haya celebrado este juicio.

13 de agosto