El infierno de Aqaba
El puerto jordano, colapsado por los huidos de Kuwait
ENVIADA ESPECIALEl puerto jordano de Aqaba se ha convertido en un mar en el que decenas de miles de egipcios vierten su desesperaci¨®n. Frustrados y agotados, pierden el control de sus nervios en el ¨²ltimo momento, junto a la entrada del transbordador que pondr¨¢ fin a la pesadilla que viven desde que Irak invadi¨® Kuwait, el d¨ªa 2, y se ensartan en sangrientas peleas. Los polic¨ªas jordanos, desbordados por el r¨ªo de gente, pegan a los insumisos con lo primero que encuentran, aunque sea un cable de tel¨¦fono, cuando no recurren al dr¨¢stico expediente de la patada en la boca.
Las broncas se montan en cuesti¨®n de segundos, cada vez que un listillo trata de adelantar unos cent¨ªmetros de m¨¢s su coche. Moahsin Maemud, un pastelero de 35 a?os, mira impasible c¨®mo estallan los focos de violencia aqu¨ª y all¨ª. ?l tiene la suerte de haber hecho el trayecto s¨®lo, sin ni?os que lloren deshidratados por el implacable sol de agosto. Su coche, como el de los dem¨¢s, va lleno de las cosas que compr¨® durante los 11 a?os que vivi¨® en el peque?o emirato petrolero que se ha tragado Irak. "Hace siete d¨ªas que sal¨ª de Kuwait. Mis ahorros se quedaron all¨ª. Los 2.000 kil¨®metros de viaje -han sido un infierno de colas, calor y esperas", dice resignado.
Moahsin cree que podr¨¢ entrar en el transbordador hoy. Mientras hablamos surge otra nueva pelea. Varios polic¨ªas detienen al causante y le encierran en su coche. Es tal el alboroto que se arma que optan por dejarlo que se escape tras propinarle unos cuantos golpes.
El director de una de las oficinas de turismo encargadas de vender los billetes para el fuerte egipcio de Inwebea, a s¨®lo tres horas de navegaci¨®n desde Aqaba, conf¨ªa a la enviada especial de EL PA?S que los tres transbordadores que diariamente. realizan el trayecto tienen licencia para llevar 200 coches y 1.700 personas cada uno, pero que "estos d¨ªas suben unas 3.00T. Ahmed Taha Yasim es uno de los que protesta por el "agobio que sufre Aqaba".
Seg¨²n Taha Yasim, el nerviosismo que provoca el "bloqueo militar que EE UU aplica en el mar Rojo impide la contrataci¨®n" de otros barcos. El domingo pasado, la Marina norteamericana impidi¨® la entrada en el golfo de Aqaba de un barco enviado por el Gobierno sudan¨¦s para recoger a 1.500 s¨²bditos llegados de Kuwait. El barco estaba vac¨ªo, pero incluso despu¨¦s de la inspecci¨®n no le dejaron llegar a Jordania.
Flujo masivo
Desde que, hace 12 d¨ªas, el Gobierno iraqu¨ª autoriz¨® la salida masiva de los casi dos millones de extranjeros que viv¨ªan en Kuwait -a excepci¨®n de los -occidentales-, el paso fronterizo jordano de Al Ruweised, a 600 kil¨®metros de Aqaba, ha experimentado un flujo masivo de refugiados. Han llegado a entrar hasta 10.000 personas por d¨ªa.
La capacidad limitada de safida del ¨²nico puerto jordano, Aqaba, ha provocado un tap¨®n de m¨¢s de 30.000 personas. De ah¨ª que efectivos de la polic¨ªa militar y del Ej¨¦rcito traten desde el lunes de controlar a la masa de ¨¢rabes con paradas obligatorias de un d¨ªa en diversos puntos de la carretera entre Amin¨¢n y Aqaba. Los refugiados reciben pan y agua gratuitos, pero ni una sombra les cobija del aplastante calor del desierto.
El rey Hussein de Jordania ha pedido a Irak que limite la salida de los refugiados para evitar el colapso total de este peque?o pa¨ªs de tres millones de habitantes, que tambi¨¦n sufre la vuelta definitiva de los 400.000 jordanos y palestinos que trabajaban en Kuwait. Egipto envi¨® ayer varios aviones a Aqaba para montar un puente a¨¦reo. Probable-mente se haga otro tanto con Al Ruwaisehd, punto fronterizo entre Irak y Jordania.
Aqaba padece, adem¨¢s del flujo de refugiados, los efectos del embargo decretado contra Irak. Su activo puerto languidece ahora con menos de la mitad de los barcos que tiene capacidad para cargar y descargar. Los cientos de camiones que d¨ªas atr¨¢s realizaban el trayecto hasta Bagdad han quedado reducidos a unas decenas. El temor a despidos masivos es palpable.
Stefani Colletti, una arquitecta romana de 30 a?os, se?ala que no ha podido acortar sus vacaciones en Jordania porque viaja con un billete especial y perder¨ªa el dinero. "Yo no tengo miedo, y aqu¨ª en la playa se est¨¢ muy bien. Especialmente ahora que los hoteles se han quedado casi vac¨ªos y no hay nadie. Pero mi familia est¨¢ loca porque vuelva", afirma.
El turismo, la segunda fuente de ingresos de Aqaba delpu¨¦s del puerto, tambi¨¦n ha comenzado a resentirse. Numerosas agencias han cancelado sus reservas y los que vienen por su cuenta han optado por un lugar que ofrezca m¨¢s seguridad. El n¨²mero de turistas espa?oles, como el de otros europeos y norteamericanos, se ha reducido considerablemente. Seg¨²n Orient Express, la mayor agencia especializada en captar turismo espa?ol, ayer s¨®lo contaba con 120 espa?oles en Jordania, y hoy con 102.
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