Los bi¨®grafos se preguntan si es posible la historia individual
Aumenta el inter¨¦s sobre la vida de las mujeres y las minor¨ªas
Una de las preguntas m¨¢s significativas de la biograf¨ªa como g¨¦nero hist¨®rico es hoy en d¨ªa si es posible la historia individual, si el hombre est¨¢ determinado y hasta qu¨¦ punto, seg¨²n se desprende de las ponencias del debate sobre Biograf¨ªa hist¨®rica, en el 17? Congreso Internacional de Ciencias Hist¨®ricas que se desarrolla en Madrid.
El historiador, y por lo tanto el bi¨®grafo, el m¨¢s le¨ªdo de todos, se encuentra con la progresiva dificultad de tener que profundizar cada vez m¨¢s en otras especialidades, seg¨²n explicaba John Elliot, autor de una reputada biograf¨ªa del conde duque de Olivares; a su juicio, las especialidades en alza son la antropolog¨ªa y la historia del arte, si bien una ponencia de tres sovi¨¦ticos, encabezados por el profesor Tikhvinsky, consideraba la biograf¨ªa como un g¨¦nero a caballo entre la ciencia y el arte y subrayaba, para sus autores, la necesidad de saber sicolog¨ªa y tener cierto talento literario.Esta b¨²squeda de nuevas herramientas para la investigaci¨®n de algo, una vida, que en principio es la unidad m¨¢s sencilla de la historia, proviene en parte de la disminuci¨®n de la importancia de las teor¨ªas deterministas, que adjudican al hombre un papel de engranaje en una maquinaria con un destino escrito. Aunque no cabe el regreso al providencialismo anterior al marxismo, las grandes biograf¨ªas hist¨®ricas del momento disminuyen la importancia de las condiciones materiales en el destino. Igualmente, en la l¨ªnea de la influyente Nueva Historia, tiende a disminuir la importancia de los grandes personajes en favor de los peque?os, y de las gestas en favor de los hechos irrelevantes.
El japon¨¦s Katsumi Fukaya, de la universidad de Waseda, relat¨® su estudio sobre las biograf¨ªas de cuatro campesinos japoneses de los siglos 17, 18 y 19, para llegar la conclusi¨®n de que no fueron vidas conformadas por el destino sino por el azar. Y Fukaya se pregunta: Si los grandes acontecimientos de la historia parecen inevitables, ?c¨®mo es posible que est¨¦n protagonizados por accidentes? Seg¨²n escribe, "las historias de los individuos deber¨ªan ser descritas como elementos accidentales en desarrollos inevitables".
Mujeres
Buena parte de las ponencias presentadas en el debate de Biograf¨ªa Hist¨®rica, uno de los m¨¢s concurridos, se refirieron a biograf¨ªas colectivas, y en especial a los estudios sobre grupos de mujeres, y de minor¨ªas raciales. Por ejemplo, las profesoras Susan Groag y Barbara Kanner, de la universidad de Stanford est¨¢n realizando un estudio sobre cerca de 2.000 biograf¨ªas de mujeres brit¨¢nicas escritas entre 1790 y 1980. Cerca de 250 voluntarios leen estos libros y responden a cuestionarios de 70 p¨¢ginas que clasifican los datos de las biografiadas sobre todo tipo de aspectos. Piensan realizar trabajos estad¨ªsticos de diverso tipo.
Otros proyectos de biograf¨ªa colectiva, ahora posibles gracias a la inform¨¢tica, y sobre grupos ya muy estudiados en el pasado como el de las trabajadoras textiles en Estados Unidos durante la industrializaci¨®n, corrigen algunas conclusiones anteriores y subrayan la importancia del prejuicio en la investigaci¨®n y, seg¨²n las conclusiones de varias ponencias, la frecuente falta de habilidad de los bi¨®grafos para armonizar la historia que relatan dentro de los cambios de su tiempo.
El estadounidense John Garraty present¨® el proyecto de un nuevo gran diccionario americano de biograf¨ªas, el American National Biography, que habr¨¢ de sustituir los 28 vol¨²menes del famoso Dictionary of American Biography (DAB), muchas de cuyas 19.000 entradas reflejan los prejuicios de su tiempo.
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