Perfectamente numerado

Ante todo, perm¨ªtame que me presente. Me llamo don 1.952.910, 1.952.910A y 28/ 380.546 (los or¨ªgenes del nombre y apellidos son f¨¢ciles de adivinar: DNI, NIF y SS). Ahora parece ser que el Gobierno crear¨¢ un n¨²mero de identificaci¨®n catastral obligatorio (NIC), con lo que nos a?adir¨¢n otro apellido num¨¦rico m¨¢s.Me asalta la duda de si empleo bien aqu¨ª el don o debo colocarme la letra delta, que en lenguaje num¨¦rico ser¨ªa lo m¨¢s apropiado.

Hace algungs a?os, Hacienda me destroz¨® (nos destroz¨®) la familia y cre¨® la unidad farniliar, que en nada se parec¨ªa a la antigua familia.

En la unidad familiar no estaban incluidos todos mis hijos, cosa que s¨ª ocurr¨ªa antes en la familia. A medida que iban trabajando o iban cumpliendo a?os, desaparec¨ªan de la unidad familiar, aunque segu¨ªan siendo mis hijos, al menos para m¨ª. Total, que al cabo de unos a?os, la unidad familiar la compon¨ªamos mi esposa y yo. La unidad familiar no se parec¨ªa en nada a la antigua familia.

En su d¨ªa, el ministerio corre spondiente cre¨® el DNI. En este documento hay un n¨²mero con el que te identificar¨¢n durante toda tu vida y puede que algo despu¨¦s. O sea, que t¨² no eres Francisco P¨¦rez, sino el n¨²mero tal. No te hagas ilusiones cuando en alguna declaraci¨®n o cualquier petici¨®n, junto a tu nombre figure el n¨²m,ero del DNI, porque lo que menos importa es el nombre.

Tambi¨¦n en su d¨ªa el ministerio correspondiente cre¨® el SOE (que no PSOE), m¨¢s tarde la SS, y m¨¢s tarde el INSS. Cre¨® unas cartillas (hoy tarjetas) y nos asign¨® un n¨²mero (tras el 28 barra), que es lo m¨¢s importante de las mismas. No se crean que el norribre del asegurado importa a la hora de extender una receta oun P-10. Lo importante es el n¨²mero, y si no, que se lo digan a los farmac¨¦uticos, que buenos quebraderos de cabeza les proporciona el n¨²mero equivocado cuando las tienen que cobrar en la oficina correspondiente.

Ahora el Ministerio de Hacienda crea el NIF para no "cometer errores de identificaci¨®n de los contribuyentes. El n¨²mero de identificaci¨®n fiscal (NIF) sirve para descubrir estos errores y atenta tanto contra la intimidad personal como pueda hacerlo el documento nacional de identidad (DNI)" (Jos¨¦ Borrell Fontelles). Luego hay atentado contra la intimidad.

Y volviendo al NIF, el se?or Borrell, en EL PA?S del 4 de mayo de 1990, escribe: "Es tan inconstitucional o lesivo con su intimidad como puede serlo el DNI. Y ciertamente se me escapa en qu¨¦ puede afectar a nuestra intimidad el que cada ciudadano tenga asignado un c¨®digo num¨¦rico de identificaci¨®n que permite diferenciar a los muchos Jos¨¦ P¨¦rez que en este pa¨ªs hay". Menudo ejemplo de despersonificaci¨®n. Yo no s¨¦ la opini¨®n de los Jos¨¦ P¨¦rez, pero a m¨ª me gustaba m¨¢s llamarme Garc¨ªa que 1.952.910A. Aunque haya millones de Garc¨ªas en el mundo. Total, que a unos y otros nos han despersonalizado y nos han numerado.

Si as¨ª tiene que ser, yo har¨ªa un ruego a quien corresponda. Yo, que para saber cu¨¢ndo nacieron mis hijos tengo que mirar la agenda; yo, que soy incapaz de saber mi n¨²mero de tel¨¦fono (como no me llamo nunca...) y menos los de los dem¨¢s, ?c¨®mo voy a saber los n¨²meros de identificaci¨®n de cualquier interlocutor, para saber con qui¨¦n estoy tratando? ?No ser¨ªa posible que nos dieran como m¨¢ximo tres d¨ªgitos? (como los servicios de urgencia). Ser¨ªa mucho m¨¢s f¨¢cil de recordar el 095, cuando quisiera hablar con mi hijo Vicente, que no el 50.521.392 (creo que lo he escrito correctamente sin bailar ning¨²n n¨²mero).

Tambi¨¦n pedir¨ªa a la Administraci¨®n que no siga pidiendo las partidas de nacimiento para cualquier convocatoria y s¨ª el DNI, NIF, SS, NIC y cuantos n¨²meros m¨¢s nos quieran otorgar. ?No les parece que es una incongruencia por parte de la Administraci¨®n? Precisamente es la que nos est¨¢ numerando.-